El joven sufría constantes dolores de cabeza y vómitos.
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Los grandes dolores de cabeza y constantes vómitos alertaron a Luis Ortiz, un joven estudiante californiano, a asistir al médico y hacerse un chequeo.
Fue allí cuando los médicos le dijeron lo que nunca imagino: Tenía una lombriz solitaria viva que se había alojado en su cerebro.
"¡Oh! Tiene un parásito en su cabeza. Vamos a operarlo y rápido, porque si no probablemente morirás", dijo el médico tras ver el escáner cerebral.
"Me levante y vomité", cuenta Ortiz. "El doctor lo sacó y dijo que todavía se estaba moviendo y pensé que eso no sonaba muy bien".
Según detalló el portal de 24 Horas, el Centro de Control y Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC por sus siglas en inglés) los quistes de larva en el cerebro se producen después de que la persona ingiere huevos microscópicos que pasan en las heces de una persona que ha tenido lombriz solitaria.
Una vez dentro del cuerpo, esas las lombrices salen del huevo y pueden hacer su camino hasta el cerebro.
Finalmente, luego de la operación, el joven estudiante agradeció estar con vida "porque, de haber esperado un poco más, probablemente no estaría ahora aquí", le dijo a la cadena de televisión CBS de San Francisco.
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