La mala ventilación o el uso de estufas en mal estado pueden provocar enfermedades respiratoria y cuadros de estrés.
Para muchos la oficina es nuestro segundo hogar. Pasamos muchas horas en nuestro puesto de trabajo y en estos días, cuando las bajas temperaturas arrecian y los calefactores y las estufas se convierten en los aparatos más apreciados, es importante saber sí el aire que respiramos mientras desempeñamos nuestra labor es saludable.
La escasa o nula ventilación, la falta de limpieza en las oficinas y el uso de estufas en mal estado o ventiladores cuyos filtros no se encuentran en las condiciones óptimas, contribuyen a lograr un ambiente laboral contaminado que pueden provocar estrés y enfermedades respiratorias.
Ante ello, la Seremi de Salud de la Región Metropolitana lanzó un instructivo para alertar a los trabajadores de los síntomas que aparecen al trabajar en una ambiente inapropiado.
Irritación de ojos, picazón en la nariz y en la garganta, sequedad en la boca y manchas en la piel acompañadas de picor son algunas señales que alertan de que el aire que respiramos está contaminado. Si además aparecen dificultades para respirar, tos o difonía estamos ante una enfermedad respiratoria.
"La contaminación ambientales produce broquintis y pueden complicar otras enfermedades y todas las que tienen que ver con el aparto respiratorio y la salud metal, cefalea, nauseas, confusión mental y estrés laboral" señaló el seremi de Salud de la Región Metropolitana, Carlos Aranda.
Bajo el Decreto Supremo N° 594 "Reglamento Sobre Condiciones Sanitarias y Ambientales Básicas en los Lugares de Trabajo", las empresas están obligadas a mantener un ambiente de trabajo saludable y libre de contaminación ambiental. De no ser así los trabajadores han de informar a las autoridades sanitaria a través del teléfono 600-360-7777.
Pn/ci
AGENCIA UNO