Fiscal Mónica Arancibia formalizó a Guiseppe Antonio Briganti Weber (20) por dos delitos de homicidio simple, además de microtráfico y porte ilegal de arma de fuego. En el inmueble del imputado se encontraron 42,14 gramos de cocaína, una balanza digital y $5.500.000 en efectivo.
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En prisión preventiva quedó Guiseppe Antonio Briganti Weber (20), tras ser formalizado por la muerte de los jóvenes universitarios Exequiel Borvarán Salinas (18) y Diego Guzmán Farías (25).
La fiscal de Valparaíso, Mónica Arancibia, quien tiene dedicación preferente en este caso, le imputó dos delitos de homicidio simple, microtráfico de drogas y porte ilegal de arma de fuego, tras lo cual el Juzgado de Garantía de Valparaíso decretó su prisión preventiva.
En la audiencia, la fiscal dio cuenta de los testimonios que sindican a Briganti como autor de los disparos, tras una discusión por un rayado en la puerta de la casa del imputado, y del hallazo del arma en una de las azoteas del inmueble en que vive el imputado, en calle Molina 332.
La supuesta arma homicida es una pistola marca CZ, calibre 9 milímetros, semiautomática, que está siendo sometida a diversos peritajes, lo mismo que los proyectiles extraídos de las víctimas en las autopsias.
En cuanto a la droga, la fiscal expuso que en la vivienda del imputado la PDI encontró 42,14 gramos de cocaína, una balanza digital, envoltorios plásticos, además de unos 5.500.000 millones en efectivo, dinero proveniente al parecer de las ventas de droga.
La medida de prisión preventiva fue recibida con júbilo por las decenas de jóvenes que se ubicaron en el exterior del tribunal a la espera del resultado de la audiencia.
La jueza Cristina Cabello decretó un plazo de investigación de 90 días y dispuso que Gendarmería tome las medidas adecuadas para resguardar la seguridad del imputado.
Pn/co
Aton Chile
