Al igual que la piel de las manos, la de nuestros pies se suele resecar, tanto por la falta de grasa en esta zona, como por su exposición diaria.
La piel de nuestros pies se suele resecar con mayor frecuencia que la piel del resto de nuestro cuerpo, esto por diversos motivos, pero el principal es que es más gruesa en esta zona, además de la falta de grasa que tiene.
La deshidratación en algunas zonas del cuerpo suele notarse por las rugosidades que se forman en él, además de pequeñas grietas, las que pueden irse incrementando a lo largo del tiempo.
Esto también se puede deber a las condiciones ambientales que existan en el lugar donde vives, o la exagerada exposición al sol o a lugares con piedras, cloro, arena, entre otros.
Lo ideal para solucionar este problema es incrementar el consumo de agua que estás teniendo, pero, por sobre todo, humectar más esta zona con una crema para piel extra seca cada noche.
Si lo anterior aún no muestra cambios, te dejamos una mascarilla casera de pepino aceite de oliva que tus pies agradecerán. En la licuadora, agrega un pepino cortado en trozos, con cáscara incluida, además del jugo de un limón y dos cucharadas grandes de aceite de oliva. Mézclalo hasta que se haga una pasta, divide esta en dos bolsas de plástico, una para cada pie, déjalos reposar de 15 a 20 minutos y enjuaga. Notarás la diferencia.
PURANOTICIA