A Garay se le abonarán los 18 meses que pasó en prisión preventiva, por lo que sólo hoy cumpliría la mitad de la sentencia.
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Con expectación se espera la eventual salida en libertad condicional del ingeniero comercial Rafael Garay Pita (44) desde el ex anexo cárcel Capitán Yáber, donde cumplió un año y siete meses de su condena a 7 años por el delito reiterado de estafa.
La semana pasada, la 2ª Sala Penal de la Corte Suprema le concedió el beneficio a Garay por estimar que no hay factores de reincidencia, según un informe psicosocial de Gendarmería, a pesar de que postuló cuando aún no cumplía la mitad de la pena.
A Garay se le abonarán los 18 meses que pasó en prisión preventiva, por lo que sólo hoy cumpliría la mitad de la sentencia del 18 de octubre de 2018, emitida por el 2º Tribunal Oral de Santiago, y confirmada el 12 de diciembre del mismo año por la Corte de Apelaciones de Santiago.
El tribunal oral condenó a Garay a 7 años de cárcel por 29 delitos de estafas reiteradas por un total $1.354 millones cometidos entre agosto de 2011 y junio de 2016. Además, lo sentenció a una multa de 21 UTM (cerca de un millón de pesos) y al pago de cerca de $850 millones de indemnización a 17 víctimas, que incluyeron una demanda de daños y perjuicios en el juicio.
Tras salir en libertad condicional, Garay debería firmar una vez a la semana en dependencias de Gendarmería, que permanecen cerradas por la cuarentena. El último domicilio que ocupó Garay antes de entrar a la cárcel fue un departamento de calle Lord Cochrane de la capital, propiedad de su ex pareja Antonella Torelli, con quien tuvo un hijo antes del episodio de la estafa.
Garay cometió sus estafas a través de Think & Co, una empresa piramidal de asesorías de inversiones. Ofrecía a las víctimas inversiones en el mercado asiático de divisas y fórex, las que nunca realizó.
Además, reportaba "ganancias" a las víctimas a través de correos electrónicos y las instaba a mantener las inversiones y a sumar interesados, como efectivamente ocurrió. Sin embargo, se gastó el dinero en lujos y vida nocturna.
Asimismo, las víctimas mantenían una relación de amistad con Garay, como fue el caso del periodista Iván Núñez, y en otros se aprovechó de la necesidad económica de las víctimas que le entregaron el fruto de años de esfuerzo.
El engaño alcanzó su punto cúlmine el 13 de junio del 2016, cuando anunció en su cuenta en Facebook que su estado de salud era grave por un cáncer. Según él, los médicos habían detectado un glioblastoma y anunció que en un plazo de 21 días dejaría toda actividad empresarial para dedicarse a mejorar su estado de salud.
A los accionistas les informó, mediante un correo electrónico, la forma de liquidación de la empresa y cómo sería la restitución de los dineros invertidos en la sociedad. En el escrito, Garay explicaba que devolvería el 100% de los recursos administrados en ese momento, según un procedimiento de tres etapas: a los inversionistas de las primeras dos, que correspondían al 92% de los 518 clientes, se les restituyó parte del dinero, pero para 36 personas de la tercera etapa no alcanzó.
Ese cáncer fue la excusa por la cual Garay salió del país el 4 de septiembre de 2016 rumbo a París en un vuelo de Air France, en el cual debía volver el día 12 de septiembre, tras realizarse un tratamiento médico en el afamado Instituto Gustave Roussy, que es conocido a nivel mundial como uno de los recintos asistenciales más importantes en la lucha contra el cáncer. Su estadía en el Gustave Roussy y el vuelo de retorno a Chile nunca se concretaron, ya que se dedicó a viajar con su segunda pareja —rumana— por Europa y Tailandia.
El 23 de septiembre de 2016 su estado pasó al de prófugo tras ser descubierto en Rumania. Interpol Chile estableció una alerta roja con su nombre. Rumania emitió una orden de detención contra Garay, luego de que las autoridades chilenas —a través de la Corte Suprema— se comprometieran a llevar a cabo la extradición.
El 18 de noviembre fue detenido en un centro comercial en la ciudad de Brasov por portar documentación falsa, que incluía dos pasaportes falsos, y el 29 de noviembre de 2016 la Corte de Apelaciones de esa ciudad aprobó la detención previa de Rafael Garay por un plazo de dos meses.
En tanto, el 14 de diciembre de ese año, la justicia chilena acogió la solicitud de extradición e inició los trámites junto al Ministerio de Relaciones Exteriores para obtener su traslado desde Rumania. El 17 de febrero de 2017 la justicia rumana autorizó la extradición y Garay llegó a Chile el 16 de marzo de 2017.
PURANOTICIA
