El insólito hecho ocurrió en Luoyang, en China, y el menor murió luego de sufrir varias lesiones en la cabeza, tras ser arrastrados por varios metros en el hospital sin que ninguna de las trabajadores se dieran cuenta.
Uno de los hechos más lamentables e insólitos del último tiempo ocurrió en un hospital de la ciudad de Luoyang, en la provincia de Henan (China).
Shang Shao, de 45 años, estaba con trabajo de parto y era trasladada por las enfermeras en una silla de ruedas, perdió a su bebé recién nacido debido a que dio a luz camino a la sala de operaciones, cayó al piso y fue arrastrado por varios metros, ya que nadie del personal del hospital se percató de la situación.
Según informa DailyMail, el bebé sufrió una serie de golpes en la cabeza, estuvo en cuidados intensivos por varias horas, pero falleció debido a los hematomas intracraneales, y la ruptura de un vaso sanguíneo entre el cráneo y el cerebro.
"El médico que sugirió hacer una cesárea ha sido suspendido ya que era inexperto y debería haber consultado a un médico de alto nivel. Las enfermeras que trasladaban a la madre han sido sancionadas, ya que no la deberían haber movido en una silla de ruedas. Ha sido un incidente terrible y nuestros corazones están con la familia", informó el portavoz del hospital, en declaraciones que entrega el citado medio de comunicación.
Pn/gm
Agencia Trayectos.