
El vehículo que llevaba pasajeros no registró a ningún herido, ya que éstos se alcanzaron a bajar.
En la región de Pará al norte de Brasil, un autobús que se encontraba viajando por un camino de tierra repentinamente cayó por un agujero de unos 20 metros de profundidad que se formó en la carretera, siendo éste arrastrado por un torrente de agua.
Si bien el vehículo llevaba pasajeros en su interior, éstos al ver el peligro que representaba el accidente, procedieron a bajarse con calma antes de que el automóvil fuese tragado por el enorme agujero.
Afortunadamente para los pasajeros, nadie resultó herido, por lo que varios de éstos grabaron el incidente y lo subieron a diversas redes sociales.
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