Click acá para ir directamente al contenido
PURANOTICIA TV ×
PURANOTICIA TV EN VIVO
Autoridad del Vaticano admite errores de la Iglesia en abusos a menores

Autoridad del Vaticano admite errores de la Iglesia en abusos a menores

  • Compartir en Whatsapp
  • Compartir en LinkedIn

El jefe de finanzas se refirió a las denuncias de pederastia en Australia.

Autoridad del Vaticano admite errores de la Iglesia en abusos a menores
Lunes 29 de febrero de 2016 11:02
  • Compartir en Whatsapp
  • Compartir en LinkedIn

visitas


El máximo responsable de la economía y las finanzas de la Santa Sede, y estrecho colaborador del Papa Francisco, el cardenal australiano George Pell, admitió "enormes errores" de la Iglesia católica ante denuncias por abusos sexuales en Australia.

El cardenal fue citado a declarar en relación a decenas de casos de pederastia ocurridos entre 1960 y 1980 en Ballarat, lugar de nacimiento del religioso y donde trabajó desde 1973 hasta 1983, y en la ciudad de Melbourne, donde ejerció de arzobispo.

Ante la Comisión Real sobre las Respuestas Institucionales al abuso sexual infantil, Pell aseguró a través de una videoconferencia desde Roma que no iba a "defender lo indefendible" y reconoció que la Iglesia incurrió históricamente en "errores graves" al no abordar adecuadamente el problema.

"La Iglesia en muchos lugares y ciertamente en Australia ha estropeado las cosas y ha decepcionado a la gente", afirmó George Pell respecto a cómo esta institución religiosa negoció con las víctimas para silenciar estos casos. Por otro lado, señaló que en muchas ocasiones las demandas eran desestimadas "en circunstancias absolutamente escandalosas" porque, según declaró, se buscaba proteger a la Iglesia de la vergüenza.

Imagen foto_00000002

El cardenal australiano convivió en la década de 1970 en un seminario junto al sacerdote Gerald Ridsdale, quien cometió decenas de abusos mientras trabajaba como capellán en el colegio St. Alipius de Ballarat, entre 1960 y 1980.

Una de las víctimas de este sacerdote fue justamente su sobrino, David Ridsdale, quien le confesó a Pell en 1993 que había sido abusado sexualmente por su tío. Sin embargo, el entonces sacerdote intentó silenciar la denuncia.

Pell admitió que el traslado de Gerald Ridsdale, de parroquia en parroquia, fue una catástrofe tanto para las víctimas como para la propia Iglesia.

Por su parte, familiares y víctimas que sufrieron estos ataques por parte del clero australiano, pidieron este domingo en Roma al cardenal George Pell, al papa Francisco y a la Iglesia Católica emprender acciones reales para evitar que se repitan casos como estos.

PURANOTICIA

Cargar comentarios