La escuadra loína tomó una drástica decisión con parte del plantel.
Se acabó la fiesta para cuatro jugadores de Cobreloa, luego que fueran sorprendidos el jueves pasado protagonizando actos de indisciplina.
La dirigencia del club que milita en la Primera B, tomó cartas en el asunto y confirmó el despido de los jugadores José Barrera, Boris Sandoval, Miguel Sanhueza y Nino Rojas, tras una desenfrenada fiesta en la antesala del partido que terminaron perdiendo ante Iberia en la ciudad de Los Ángeles.
Incluso, el primero de los desafectados, José Barrera, fue captado orinando sobre una patrulla de Carabineros, lo que decantó en que Cobreloa debiera disculparse públicamente con la institución policial y marginara temporalmente a los miembros del plantel que se fueron de copas.
"No vamos a tolerar este tipo de situaciones", señaló Gerardo Mella, presidente del club loíno, quien durante el fin de semana ya prometía duras penas para los indisciplinados.
Aún resta esperar la sanción que recibirán los otros involucrados en la fiesta, pero Mella aseguró en conversación con BíoBío Deportes, que la situación será analizada pronto, ya que "ha sido tan traumático esto que no podemos llegar y tomar determinaciones de las que nos podamos arrepentir".
A los líos extra futbolísticos se suman los problemas deportivos y económicos por los que atraviesa institucionalmente Cobreloa, que marcha en el puesto 12 de la segunda rueda del torneo de la Primera B, con pocas posibilidades de regresar a la máxima categoría del fútbol chileno.
PURANOTICIA