"Estamos dispuestos a defender los intereses nacionales del Reino Unido cuando sea necesario", afirmó un portavoz del Ejecutivo.
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El Reino Unido no impondrá medidas inmediatas de represalia contra Estados Unidos si Donald Trump acaba fijando aranceles sobre las importaciones de acero y aluminio británico, según explicó el Gobierno de Keir Starmer tras una llamada mantenida con su homólogo norteamericano.
"Hemos dejado muy claro que, en lo que respecta a la industria siderúrgica británica, estamos dispuestos a defender los intereses nacionales del Reino Unido cuando sea necesario", afirmó un portavoz del Ejecutivo.
Según cifras ministeriales, actualmente el 5% del acero y el 6% del aluminio británico se exporta a Estados Unidos. "Seguiremos manteniendo la cabeza fría ante cualquier especulación sobre aranceles", expuso.
Downing Street aseguró que la relación transatlántica sigue siendo "fuerte" y que está basada en un comercio "recíproco" y "equilibrado", motivo por el que se está trabajando para evitar que la Casa Blanca penalice el flujo comercial entre Londres y Washington.
En cualquier caso, el Gobierno recordó que ya asumió un compromiso inversor por 2.500 millones de libras para impulsar el sector metalúrgico.
(Imagen: Gonvarri Steel Services / Europa Press)
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