El Departamento de Defensa de Estados Unidos adquiere un 15% de la compañía por US$400 millones con el objetivo de reducir la dependencia a China.
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La empresa estadounidense de tierras raras MP Materials ha comunicado la entrada del Pentágono en su capital social, con una participación del 15% por 400 millones de dólares y la inversión de varios miles de millones adicionales para construir una refinería de minerales.
Según la nota de prensa, dicha planta generará 10.000 toneladas de materiales magnéticos y de alta conductividad al año. Aún no se ha revelado su emplazamiento, pero estará lista para 2028 y dará servicio tanto a contratistas de defensa como privados.
La compañía también espera incrementar las capacidades de separación de tierras raras pesadas de sus instalaciones de Mountain Pass (California) para convertirlo en un "activo estratégico nacional" donde se extraigan, separen y refinen compuestos de gran pureza en un solo lugar.
Las tierras raras magnéticas son claves para los sistemas de armamento del caza F-35 Lightning II, los drones no tripulados Predator o los submarinos de las clases Virginia y Columbia. También se emplean en los misiles Tomahawk, utilizados, por ejemplo, en el reciente ataque de Estados Unidos contra Irán.
"Esta iniciativa supone una acción decisiva de la Administración Trump para acelerar la independencia de la cadena de suministro estadounidense", ha afirmado el fundador, presidente y consejero delegado de MP Materials, James Litinsky.
"Estamos orgullosos de tomar parte en esta revolucionaria asociación público-privada y estamos profundamente agradecidos al presidente Trump, a nuestros socios en el Pentágono, y a nuestros empleados, clientes y partes interesadas por su inquebrantable apoyo y dedicación", ha añadido.
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