La agente de Chile y subsecretaria de Relaciones Exteriores, Ximena Fuentes, sostuvo en su exposición que la postura de Bolivia en La Haya “identifican la necesidad crítica de un fallo que explique y aplique el derecho internacional consuetudinario de aplicación”.
Chile concluyó este jueves sus exposiciones en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) en La Haya, Países Bajos, en el marco de los alegatos orales del juicio entre Chile y Bolivia por los usos de las aguas del río Silala.
La agente de Chile y subsecretaria de Relaciones Exteriores, Ximena Fuentes, sostuvo en su exposición que la postura de Bolivia en La Haya “identifican la necesidad crítica de un fallo que explique y aplique el derecho internacional consuetudinario de aplicación”.
Aseguró que nuestro país nunca ha objetado a Bolivia la soberanía de los canales en su territorio ni que corresponda a ese país desmantelar los canales en cumplimiento del derecho internacional. “La sugerencia de Bolivia a efectos de que Chile objetó el desmantelamiento en 2002 y en 2010, o en cualquier otro momento, no está respaldada por los documentos históricos”, manifestó.
“Chile ha dejado claro en sus escritos que si el desmantelamiento de las canalizaciones da lugar a una reducción del caudal superficial o al deterioro en la calidad del agua esto no será considerado de por sí una violación del derecho internacional consuetudinario”, afirmó.
Fuentes indicó que “Chile ya ha confirmado en numerosas ocasiones que no tiene ningún interés en el mantenimiento de estas canalizaciones en Bolivia y de hecho alienta su desmantelamiento”, dijo.
La agente aseveró que Chile “ha confirmado en todo momento la condición internacional de las aguas del Silala y los derechos y obligaciones de Bolivia y de Chile como copartícipes ribereños del sistema del río Silala acuerdo con el derecho internacional consuetudinario y por el contrario Bolivia ha cambiado de posición y argumentos de su caso jurídico, yendo y viniendo desde su postura en 1999 cuando reconocían el carácter compartido del río hasta la negación total de su condición internacional”.
“Las demandas reconvencionales de Bolivia han extendido innecesariamente la disputa ante esta corte. Se basan en las mismas premisas falsas de las defensas de Bolivia a las demandas de Chile y por lo tanto deben ser desestimadas en su totalidad y los cambios en la posición de Bolivia y su retirada constante en sus alegatos escritos no indican de alguna manera la ausencia de un diferendo, identifican la necesidad crítica de un fallo que explique y aplique el derecho internacional consuetudinario de aplicación e introduzca claridad en las relaciones jurídicas entre las partes en lo que respecta al Silala”, agregó.
Ahora, la CIJ deberá entregar su determinación final sobre el caso, la que se puede demorar meses o años. Recordar que dicha decisión es vinculante y no permite apelación.
PURANOTICIA