El actor nacional abordó abiertamente el complejo momento familiar que se encuentra atravesando, luego de que se viralizara un video donde besa a otra mujer, lo que terminó por quebrar su matrimonio de 20 años con Angélica Castro.
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En septiembre del 2022 un video se viralizó rápidamente en redes sociales, en el que aparecía el actor nacional Cristián de la Fuente besando apasionadamente a una desconocida mujer en un bar de la Ciudad de México, siéndole infiel a su esposa, la comunicadora Angélica Castro.
Esto provocó un quiebre definitivo entre la pareja, ya que luego de una ola de especulaciones y viente años de matrimonio, de la Fuente confirmó a diez meses del escándalo el término de su relación con la moldeo.
Lo anterior, ya que luego de haber mantenido completo hermetismo al respecto, el intérprete decidió romper el silencio y abordar el complejo tema dentro de una íntima conversación con el periodista azteca Pablo Montero, en su programa “El Minuto Que Cambió Mi Destino”.
“Los 20 años (de matrimonio) fueron maravillosos hasta que en septiembre pasado cometí un grave error al hacer una estupidez públicamente: Darle un beso a una mujer que no era mi esposa”, expuso el chileno, añadiendo que “es muy duro dormir todas las noches con el sentimiento de que el que lastimó y fracturó mi familia fui yo, entonces tengo una rabia constante conmigo. Es muy duro porque un matrimonio puede tener altos y bajos, pero 20 años de una relación y fracturarla así, fue una de las grandes cosas que me arrepiento”.
Continuando con su relato, de la Fuente detalló que “perdí a mi familia, perdí ese núcleo que éramos los tres. El reparar el daño que le hice a Angelica Castro, que es la última persona a la que me hubiera gustado dañar. Desde ese día ya no estamos juntos, es duro”.
“La humillación en Chile fue muy dura para ella. Todos empezaron a comentar cosas y me tienen como el peor del mundo. Por muchos años no se habló de mi vida personal, pero después de este error y equivocación se dicen muchas cosas”, expuso Cristian.
“Hay distintos periodistas, hay distinta gente que opina, tú puedes opinar, pero deben tener mucho cuidado. Después ponen títulos, pero tienen esa autoridad de poder juzgar y hablar. No se dan cuenta que hay gente que los lee o escucha como mi hija, Laura, y la lastiman”, concluyó.
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