"El proceso y la estructura te genera un cierto estado de tranquilidad", explicó el arquero de 20 años.
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Un gran momento está atravesando el portero de Universidad Católica, Thomas Gillier, quien a pesar de su corta edad, logró ganarse un lugar en el once estelar del conjunto "cruzado", siendo titular en 17 encuentros en la presente temporada.
En conferencia de prensa, el cancerbero de 20 años abordó varios temas, entre los cuales a sus referentes en el arco, apuntando a un histórico de la Selección chilena.
"Tengo varios referentes, en específico tengo tres en los cuales me gusta mucho visualizar entrenamientos, ejercicios y partidos; uno es bastante conocido en Chile, Claudio Bravo es uno de mis referentes y creo que es un ejemplo, más allá de lo que es como jugador, también cómo es como persona, de qué manera piensa, es una persona muy inteligente", reveló el cuidavallas.
En plano internacional, el oriundo de Las Condes señaló que "me gusta mucho Hugo Lloris que ahora juega en LA Galaxy, mucho tiempo de la selección francesa, me gusta mucho Iker Casillas, y voy viendo, sacando muchas cosas de varios arqueros, también de algunos del torneo nacional. Soy una persona muy receptiva".
En cuanto a su crecimiento profesional, destacó que "he ido sumando cosas, dentro de cada partido trato de ser muy receptivo con la información, centrarme en el presente y en mi desarrollo me hace mejorar día a día. Además, el manejo emocional ha sido fundamental, equilibrar lo psicológico en las victorias y en las derrotas, ser regular en eso te hace ser mucho más estable".
Asimismo, manifestó que "puede sonar una locura, pero desde que era sub-15 me preparé para jugar en el plantel profesional. Al final, es un proceso, hay que estar tranquilo, es algo que vengo haciendo hace cuatro, cinco años. El proceso y la estructura te genera un cierto estado de tranquilidad".
Por último, valoró el respaldo que le ha brindado la institución, especialmente tras el fallecimiento de sus padres. "Me he sentido acompañado por el club, hay grandes profesionales. De parte de Buljubasich (gerente deportivo), hay una preocupación constante; el club, al final es tu segunda casa y en ese aspecto se han portado de gran manera. También ha estado presente Juan (Tagle, presidente) constantemente", detalló Gillier.
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