Cabe recordar que todo esto se produjo luego de que los jugadores del conjunto albirrojo se abalanzaran sobre el árbitro una vez concluido el partido ante los canarios jugado la noche de este viernes, obligando a los efectivos de seguridad a intervenir para resguardar al colegiado.
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Durante la tarde de este sábado hubo novedades con respecto a la situación judicial del ex seleccionado nacional y actual portero de Unión San Felipe, Paulo Garcés, y su compañero Facundo Monteseirín, detenidos luego de la agresión a un guardia de seguridad en el marco del partido que el cuadro aconcagüino perdió ante San Luis de Quillota en el estadio Lucio Fariña Fernández la noche del pasado viernes.
De acuerdo a información de radio Biobío, ambos futbolistas fueron trasladados hasta una comisaría cercana y al cabo de un par de horas, el experimentado guardameta fue puesto en libertad.
Sin embargo, el defensa argentino no corrió con la misma suerte. Tras pasar por control de detención y enfrentar una audiencia, el zaguero quedó con prohibición de acercarse a la víctima y arraigo nacional por los 90 días que dure la investigación.
Cabe recordar que todo esto se produjo luego de que los jugadores del conjunto albirrojo se abalanzaran sobre el árbitro una vez concluido el partido ante los canarios, obligando a los efectivos de seguridad a intervenir para resguardar al colegiado.
En ese contexto, Garcés habría empujado a la víctima, pero Monteseirín fue un paso más allá y le propinó un golpe al denunciante.
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