El entrenador del "Tanque", el argentino Andrés Schneiter, aseguró que el paso por el torneo alemán, donde su pupilo superó la qualy, dejó buenas sensaciones.
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Cristian Garin (120° del mundo) sufrió una dolorosa eliminación en octavos de final del ATP 500 de Hamburgo, al caer frente al noruego Casper Ruud, 4 del planeta, en un partido donde lo había aplastado en el primer set, pero que no pudo mantener el superlativo nivel, se "desconectó" y le dio vida a su rival.
Pese a la amarga derrota, el entrenador del "Tanque", el argentino Andrés Schneiter, aseguró que el paso por el torneo alemán, donde su pupilo superó la qualy, dejó buenas sensaciones.
"Antes de lesionarse se había sentido muy bien en los Masters 1000 de Indian Wells y Miami en cemento, habíamos encontrado la forma de jugar y yo creo que va a tener una gran temporada hasta el US Open e incluso después de Nueva York. Tiene el juego perfecto para que le salgan las cosas bien en la superficie", expresó el "Gringo" en conversación con El Mercurio.
"Está volviendo de a poquito a ganar ritmo, no fue fácil porque fueron ocho semanas sin jugar y después de eso quedas con un par de dudas respecto de tu físico. Además, al no competir por tanto tiempo, aparecen dolores nuevos en la espalda, en el brazo, en el hombro o en las piernas, así que la transición se fue haciendo de a poco", añadió.
En la misma línea, agregó: "Esta semana volvió a encontrar un gran nivel, que era lo que veíamos que podía lograr. Estamos contentos porque volvió a sentir que puede jugar contra los mejores, lo que para nosotros es reimportante".
Por último, sobre la caída ante Ruud, Scheniter sostuvo: "Tal vez no pudimos sostener el nivel que jugamos el primer set, pero hay que quedarse que cuando él jugó bien, fue muy superior al número cuatro del mundo, que es un gran jugador de tierra. Debimos haber sostenido el nivel un poquito más, pero hay que acostumbrarse a este nivel después de la lesión para recuperar el nivel que pudimos tener hasta antes de eso".
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