
El entrenador de Universidad de Chile declaró que jugar el torneo "más que premios son derechos adquiridos".
La derrota por 1-0 que cosechó Universidad de Chile ante Botafogo significó su eliminación en Copa Libertadores, luego de quedar en tercer lugar del grupo A con diez puntos, teniendo que conformarse ahora con los playoffs de Copa Sudamericana.
El día después de la caída, el técnico Gustavo Álvarez manifestó en conversación con radio ADN que "estamos bien, preparándonos para el regreso. Tranquilos, ya mañana volvemos a trabajar pensando en el sábado. Por ahora pensamos en O’Higgins".
En la misma línea, el estratego aseguró que "estuvo cerca, pero no alcanzó. Nos faltó un conjunto de cosas, no se reduce a un solo partido. Somos competitivos, tenemos que superarnos para que la próxima sea mejor, sin excusas".
Además, el argentino fue consultado por los dichos del capitán del cuadro universitario, Marcelo Díaz, quien calificó la Sudamericana como un "premio de consuelo", palabras que no encontraron respaldo del ex DT de Huachipato.
"Más que premios son derechos adquiridos. En su momento ya pensaremos en eso, ahora con la cabeza puesta en corregir lo que no se hizo bien ayer, prepara el partido del sábado y luego la Copa Chile", remarcó el entrenador.
Por último, Álvarez reveló que "nosotros entramos al camarín y prohibido mirar al piso. Nos miramos todos a la cara con la dignidad y el orgullo de pertenecer a esta institución. Tocó perder, pero con la cabeza levantada. No estamos en deuda. No siento eso".
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