Estos son los 8 alimentos que no debes guardar en el refrigerador

El frío puede causar alteraciones en su sabor, en sus propiedades o, incluso, hacer que se pongan malos más rápidamente

Jueves 15 de mayo de 2014 a las 13:35 horas

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En muchas casas se comete el error de guardar ciertos alimentos en el refrigerador, ya que se piensa que se mantendrán en mejores condiciones. Sin embargo, estos pueden perder su sabor y sus propiedades. 

 

Aquí te mostramos 8 ejemplos:

Los tomates: 

Pierden todo su sabor en la nevera. El aire frío hace que se frene el proceso de maduración, que es lo que les hace tan sabrosos. Además también se altera su textura, ya que la baja temperatura rompe las membranas en el interior de las paredes y la pone harinosa. 

 

Papas: 

La baja temperatura hace que el almidón se convierta en azúcares, por lo que se convertirá en una papa dulce y harinosa. Lo más recomendable es guardarlas en una bolsa de papel, ya que gracias a su porosidad, las papas tardan más en pudrirse.

 

Paltas: 

Las paltas deben estar en un lugar fresco y con poca luz. Al meterlas al refrigerador se pondrán completamente negras y duras como una piedra.

 

Miel:

Mientras la miel esté en un recipiente bien cerrado, no existe ninguna razón por la que haya que guardar este alimento en el refrigerador. Al hacerlo, se cristalizaría.

 

Cebollas: 

La humedad hace que las cebollas se reblandezcan y se pongan mohosas rápidamente, además empiezan a germinar pequeños brotes. Para evitar que se pudran tan pronto hay que guardarlas en un lugar fresco y seco. 

 

Albahaca:

En el refrigerador se marchitará rápidamente y, además, absorberá todos los olores del resto de alimentos que haya a su alrededor. Es mejor guardarla fuera, en un vaso con agua fresca, como si fuera flores recién cortadas.

 

Plátanos: 

Las bajas temperaturas anulan las enzimas que permiten madurar a las frutas como el plátano. El frío hace que su pulpa se vuelva pastosa o su piel se ponga negra. 

 

Chocolate: 

No hay que meterlo en el congelador, salvo que contenga un relleno lácteo o haga mucho calor. El frío hará que le salga una especie de capa blanquecina, que significa que ya no sabe cómo debería y su textura no es la que debería ser.

 

Fuente: Agencia Trayectos