Miércoles 24 de abril de 2024 16:01
Damnificados del megaincendio juntan firmas para presentar demanda colectiva y denuncian vertedero en ex zona de acopio en Quilpué
Agrupación Damnificados Quilpué - Viña del Mar pide mejor diálogo, más claridad en la información, ayuda psicológica, mejorar la velocidad de entrega y la calidad de las viviendas de emergencia, además de solicitar que estén listas para ser habitadas.
En proceso de recolectar firmas para realizar una demanda colectiva se encuentra la agrupación Damnificados Quilpué - Viña del Mar, a propósito de que en una semana más se cumplen tres meses desde que ocurrió aquel trágico megaincendio en ambas comunas, que destruyó casas, sueños y toda una vida de esfuerzo.
El fin de semana pasado, varios vecinos de Villa Independencia, una de las zonas afectadas en la Ciudad Jardín, protestaron interrumpiendo el tránsito en el Camino Internacional, debido a que no ven avances en los temas urgentes que necesitan resolver. En tal sentido, con banderas y parándose en medio de la calle, solicitaron la ayuda de parte de las autoridades, exponiendo que continúan viviendo en carpas en medio de la lluvia que afectó a la comuna y que temen por lo que vayan a tener que pasar en los meses de invierno que ya se acercan.
Manuel Silva, vocero del colectivo que reúne a unos 70 representantes de distintos barrios afectados por los incendios del 2, 3 y 4 de febrero pasados, quien ha participado en la comisión de la Cámara de Diputados que investiga lo ocurrido en febrero, denunció la presencia de un verdadero vertedero en Quilpué, donde hasta hace unas semanas funcionaba uno de los lugares de acopio de escombros del incendio, y llamó a las autoridades a solucionarlo. "Esto es en la calle Quillota con Mena, donde hay dos jardines cerca, y resulta que los vecinos han estado constantemente reclamando por esto. Se está convirtiendo en un vertedero y lo más lo más triste de todo es que el municipio con el Minvu se tiran la pelota y no hay ninguna solución".
Pero además indicó a Puranoticia.cl que lo están trabajando “en los diferentes sectores, de acuerdo a sus intereses, a fin de levantar algunos recursos de protección si es necesario, pero nuestra gran tarea es llegar justamente a entablar una demanda colectiva al Estado, e incluso realizar una demanda ante la Corte Interamericana, si es necesario lo vamos a hacer. Muchos vecinos han sido insistentes en decir que no estamos avanzando, que no se está haciendo nada, pero esto no se da de la noche a la mañana. Se están reuniendo firmas hace un tiempo y se definirá definitivamente en su debido momento”.
El dirigente explicó que además del problema de la lluvia y la demora en la entrega y habilitación de servicios de las viviendas de emergencia, hay temor por expropiaciones, devalúo de propiedades y demoliciones, y expresó que no hay un diálogo horizontal con las autoridades a cargo, sino más bien “imposiciones”.
“Lo más importante es la apertura del diálogo, tanto con el gobierno central y el local con los vecinos de todas las zonas afectadas. No hay un diálogo que sea ameno, que sea empático, porque aquí lo que el gobierno pretende es imponer soluciones que muchas veces no tienen ni se acercan a lo que se necesita. Por ejemplo, hablar de demoliciones por parte del subsecretario de Serviu, y hacer un video en el que se graban y dicen que van a demoler más de 2.800 casas en Viña del Mar es una locura, entendiendo que hay muchas casas que se pueden restaurar, de hecho algunos vecinos lo han hecho en Canal Beagle. Los vecinos no van a permitir que les estén imponiendo cosas sobre sus propias casas. El tema de la demolición, si no hay un papel firmado que acredite que al momento de demoler se va a reconstruir ya y que esa reconstrucción va a quedar finalmente para los vecinos que viven en esa zona es importante. Hay que abrirse al diálogo y que sea una negociación y no una imposición”, dijo.
Junto a esto, señaló como “sumamente importante” que se acelere la entrega de las casas de emergencia “porque junio y julio son meses sumamente helados y esperemos no muy lluviosos, pero sí son muy helados, y hay personas que si bien es cierto hay muchas familias que estado auto reconstruyendo no han logrado terminar sus casas porque ya no alcanzan los recursos. Es decir, se levantan las casas en una primera etapa: piso, perímetro, techo y hasta ahí no más quedan. Es el caso de nosotros con mi madre, y es porque no hay recursos para forrar, colocar la electricidad, el agua, en fin. Pedimos apurar un poco ese proceso y que finalmente las casas de emergencia nos lleguen, sean instaladas y que no nos digan ‘no se pueden habilitar’, que es el caso del 70%, porque queda mal hecha la grifería, no llegan los baños, hay muchos detalles que finalmente hacen que no se puedan habitar. Les dicen a las familias ‘aquí tiene la casa, pero hasta el momento no la pueden habilitar’ y quedamos en la misma”.
Finalmente, mencionó que “también está la duda por el tema de los devalúos, pues viene un devalúo con nuestras casas pero no desde el 2 de febrero en adelante sino que desde el 2022 en las casas de El Olivar, al menos. El primer semestre del 2021 estaban alrededor de los 23 millones de pesos y en el segundo semestre también, no era mucha la variación, pero en el 2022 ya estaban bajando a 21 millones en el primer semestre. Después del 2 de febrero las casas están en el avalúo fiscal de 687.000 y eso sí que es irrefutable, y si dicen que es para evitar el pago de contribuciones, en El Olivar muchas casas nunca han pagado”.
Lo que hace mucha falta, concluye, es “la ayuda psicológica, sobre todo con los niños”, y señaló que pese a que las autoridades han dicho que se está haciendo este trabajo, no se ha visto en todos los sectores. “Hablaron de un porcentaje y si nosotros nos paramos en el cerro en Monte Sinaí y les preguntamos a las familias si han ido especialistas del gobierno a atender a adultos mayores, la respuesta es no, a jóvenes no y a niños no”.
PURANOTICIA