Municipalidad de Viña del Mar totalmente desfinanciada: Nuevo informe de Control revela que propuesta de Presupuesto 2021 sería imposible de cumplir

Como un verdadero balde de agua fría sobre sus cabezas, fue tomado al interior de la Municipalidad de Viña del Mar un informe emanado por la Dirección de Control, que da cuenta de un resultado negativo en la ejecución presupuestaria de hasta $11.041 millones ($11.041.213.000) al 30 de septiembre de 2020, por parte de la administración de Virginia Reginato en la Alcaldía, lo que incluyó una advirtencia para "tomar medidas" en cuanto a ingresos municipales y restricción de gastos.

Según se indica en el documento, al cual Puranoticia.cl tuvo acceso, la situación presupuestaria al 30 de septiembre, conforme a los estados presupuestarios y financieros, dio un resultado negativo de $9.121 millones ($9.121.451.000) producto de un menor ingreso de $23.808 millones ($23.808.756.000) y un menor gasto de $14.687 millones ($14.687.304.000) respecto a lo presupuestado al período indicado. Sin embargo, tras algunos ajustes, se advirtió que el resultado negativo era mayor en $1.919 millones, por lo que la cifra real es de $11.041 millones.

Pero esto no es todo, pues el informe emanado recién el 23 de noviembre de 2020 señala que la deuda para el 2020 asciende a $13.198 millones ($13.198.520.000) en el ítem Pasivo a Corto Plazo y a $3.674 millones ($3.674.846.000) en el ítem Pasivo a Largo Plazo, según se estableció en base a datos de la Dirección de Administración y Finanzas mediante una serie de informes y documentos.

Para entender mejor estas cifras, es importante traer a colación la alta dotación de contratos a honorarios al interior de la Municipalidad de Viña del Mar, situación que fue advertida también por la Dirección de Control, que indicó en su informe que este gasto al 30 de septiembre se ha incrementado en un 9,8% respecto al año 2019. "El aumento significativo advierte el gasto que pudiera significar a futuro, si no se toman las medidas al respecto", indica el área de Control.

Este incremento de 9,8% en los contratos a honorarios resuena aún más, teniendo en cuenta que los ingresos municipales durante este 2020, debido principalmente a la pandemia del Covid-19, han disminuido en un 25% en comparación a 2019.

Y también llaman que tener presente los juicios de gran envergadura que tiene el Municipio de la Ciudad Jardín, tales como el denominado «Estacionamiento subterráneo de plaza Sucre» y el llamado «Estadio Sausalito», ambos con la empresa Besalco, y que se encuentran en etapa de apelación en la Corte de Apelaciones de Valparaíso.

De esta forma, el resultado financiero al 30 de septiembre de 2020 indica que el menor ingreso ajustado es de -$23.808 millones y que el menor gasto devengado es de $14.687 millones, lo que da como resultado un déficit de $9.121 millones.

PRESUPUESTO 2021

Cabe señalar que este informe era muy esperado por parte de los concejales viñamarinos, pues su resultado es relevante a la hora de proyectar la deuda y el déficit con la que la Municipalidad de la Ciudad Jardín culminará el año 2020, pensando en el proyecto de Presupuesto 2021, iniciativa que debe ser zanjada antes del 15 de diciembre.

En ese sentido, vale hacer presente que el actual proyecto de Presupuesto 2021, presentado por la administración Reginato, considera que la deuda y déficit en la casa edilicia no sobrepasaría los $10.000 millones. Esto es importante, ya que la iniciativa propuesta estaría desfinanciada, situación advertida y temida con anterioridad por parte de los ediles.

Es más... fuentes de Puranoticia.cl al interior de la Municipalidad de Viña del Mar sostienen que el déficit proyectado para el 31 de diciembre será entre $15.000 millones y $20.000 millones, lo que hace muy difícil que se apruebe el presupuesto planteado para el próximo año, más aún, tomando en consideración la negativa a rebajar partidas de contratación de personal a honorarios, de más de $3 millones, o congelar el pago de horas extraordinarias, tal como lo han solicitado algunos ediles de oposición a la gestión municipal, en manos de la UDI. 

Otro hecho a tomar en cuenta es que un presupuesto con déficit, es decir desfinanciado, implica altos niveles de morosidad con proveedores, que van desde empresas grandes hasta pymes más pequeñas, los que ni siquiera se encuentran en contabilidad, vale decir, no tienen una fecha concretada para recibir sus dineros.

PURANOTICIA