Jueves 4 de marzo de 2021 17:13

Marcelo Díaz a fondo: Diputado critica gestión del Gobierno Regional de Valparaíso y ratifica apoyos a Sharp y Ripamonti en Municipales

Parlamentario del Movimiento UNIR abordó con Puranoticia.cl lo que fue el año legislativo 2020 y también hizo una proyección de lo que será este 2021 en el Congreso Nacional.

El 2020 fue un año de cambios para el diputado Marcelo Díaz Díaz, pues luego de 30 años de militancia en el Partido Socialista (PS), decidió renunciar a sus filas para comenzar un nuevo proyecto, denominado Movimiento UNIR, el cual fue encontrando paulatinamente su ubicación hacia la izquierda del espectro político.

Bajo este contexto, el parlamentario del Distrito 7 (zona costera de la región de Valparaíso) hizo un repaso con Puranoticia.cl acerca del intenso periodo legislativo del 2020, pero también lo proyectó hacia lo que viene este 2021, con importantes elecciones a cuestas, donde se vislumbran dos inéditos procesos: el de Gobernador Regional y el de la Convención Constitucional.

Pero eso no es todo, pues el legislador también adelantó lo que será el proceso municipal en Valparaíso y Viña del Mar, entregando su respaldo total y absoluto a Jorge Sharp, en la Ciudad Puerto, y a Macarena Ripamonti, en la Ciudad Jardín. De ellos, destacó sus respectivos proyectos con énfasis en la participación ciudadana.

Diputado, éste es un año clave en materia eleccionaria, con inéditas elecciones de Convención Constitucional y gobernadores regionales, pero también con presidenciales a fin de año. ¿Cómo vislumbra todos estos procesos?

- Como tremendamente relevantes, en particular creo que hay dos hitos muy significativos, el proceso constituyente, que arranca con la elección de convencionales y que nos va a permitir por primera vez en nuestra historia dotarnos de una Constitución democrática, elaborada y sancionada democráticamente, creo que ese es un primer gran hecho. Lo segundo es la elección de gobernadores regionales, donde si bien ha habido debate en torno a las atribuciones, capacidades y recursos que van a tener, la sola elección genera quiebre en la lógica de concentración del poder a nivel central y abrirá un ciclo de transferencia y de presión para que ocurra esa transferencia de poner recursos desde el centro a las regiones y creo que eso es tremendamente virtuoso para el desarrollo más armónicos de los territorios de Chile. Finalmente está la elección presidencial, que se produce en un cuadro de alta complejidad porque vamos a tener el proceso constituyente en marcha y porque será un Gobierno muy exigido en términos de hacer transformaciones sustantivas, pero que también tendrá tremendas limitaciones por el impacto de la pandemia en la economía y en las arcas fiscales.

¿Cuál es su evaluación de lo que fue el año legislativo 2020, con una importante cantidad de proyectos aprobados o tramitados, pero también con una importante cantidad de controversias encima?

- En términos de rendimiento y producción legislativa, ha sido uno de los años más intensos, creo que hay que sacar lecciones de los ritmos de trabajo y sobre su calidad, pero creo que la Cámara ha tenido la flexibilidad de hacerse cargo de muchos temas y darle celeridad que requieren. Lamentablemente no tengo la misma opinión del Senado, que creo que es un cuello de botella para muchos proyectos que son despachados de la Cámara y pasan mucho tiempo en el Senado. Pero también, está claro que este sistema de veto contra mayoritario, que hacen tan difícil sacar adelante el 10% y muchas otras normas, creo que llegó a su fin. Es muy sano en ese sentido que la nueva Constitución no vaya a tener estos amarren que hace que el Parlamento, a pesar de tener mayoría, no pueda aprobar leyes ampliamiente respaldadas porque hay una minoría con poder de veto en el marco de la actual Constitución.

Bajo este contexto, ¿cómo proyecta el año legislativo 2021, donde también se proyecta un intenso trabajo?

- Yo creo que aquí hay que hacer una diferencia en relación a otros años legislativos. En general los años de elecciones baja la intensidad del trabajo legislativo, porque parlamentarios van a la reelección, etcétera, y creo que no podemos darnos ese lujo este año, tenemos que mantener un alto ritmo de producción legislativa, pero que ésta esté en sintonía con las medidas para hacer frente a la pandemia, donde la voz del Ejecutivo es fundamental, aunque no ha sido del todo acertada, y también para ir empezando a perfilar los cambios más de fondo para construir un país con bases más justas que las que tenemos hoy.

Teniendo como base el 18 de octubre y sus respectivas demandas ciudadanas hacia el mundo político. ¿Cuál es la autocrítica que puede realizar usted como político de oposición al Gobierno, estando primero en la ex Nueva Mayoría y ahora desde la independencia?

- Aquí yo creo que es una crítica global de la que tenemos que hacernos cargo todas y todos. Y es que desde el retorno a la democracia, la promesa que se hizo a Chile era crecer con igualdad, y evidentemente hubo crecimiento económico, lo que se nota simplemente saliendo a la calle o mirando al país en perspectiva, pero la otra dimensión de la promesa, que es la igualdad o equidad, no solamente no se avanzó, sino que al hacerse más ricos los más ricos, esa distancia se profundizó, lo que ha generado problemas severos de cohesión social y cuando una sociedad carece de cohesión, se producen estallidos como el del 18 de octubre.

¿Cómo analiza el rol que ha tenido el Gobierno Regional de Valparaíso durante la gestión del intendente Jorge Martínez?

- Yo no tengo una buena opinión de la gestión del Gobierno Regional, no sólo por estas situaciones anómalas que han aparecido, como la compra de insumos médicos, lo que denuncié de las residencias sanitarias, pero también uno nota ausencia en temas que para la ciudadanía son tremendamente importantes, como la seguridad ciudadana, que es probablemente uno de los principales flagelos que afectan al conjunto de la región, pero que se han agudizado con bandas de narcotráfico y sobre la cual no hay respuestas eficientes por parte de las instituciones a cargo del orden público, que es Carabineros y la Intendencia. Creo que ha habido poca proactividad para adoptar medidas que permitan alivianar la situación que viven los sectores turísticos y gastronómicos, entonces noto cierta pasividad, es como si hubieran abdicado de cumplir un rol integral en la región de Valparaíso.

Usted respalda la gestión y la reeleección de Jorge Sharp en Valparaíso, más allá de todos los temas que tiene en Contraloría, además de una serie de críticas desde el mundo político. ¿Por qué usted decide apoyarlo?

- Porque mi percepción con el trabajo en terreno es que Valparaíso no sólo ha aumentado de acuerdo a cifras entregadas en Cuenta Pública, reconstrucción de ciertas áreas de servicio municipal, hay medidas importantes como Óptica Popular, Farmacia Popular, Laboratorio Clínico Popular, que son avances significativos y doblemente valorables en una Municipalidad que fue recibida con una grave crisis económica. Además, un segundo elemento, es que esto se ha hecho construyendo fuerza social y ciudadanía organizada, es decir no es un Municipio que mira desde arriba, sino que se enraíza en el territorio. Eso permite reponer la dignidad de nuestros territorios y de los ciudadanas y ciudadanos de Valparaíso. Creo que ese es un mérito de este concepto de Alcaldía Ciudadana. Por eso entregué mi respaldo temprano al alcalde Jorge Sharp porque creo que esos elementos, además de un conjunto de otras gestiones como parquímetro para Bomberos, recolección de basura, ordenamiento de cuentas municipales, y más allá de que no hay ninguna gestión exenta de problemas y dificultades, me parece que el balance es positivo y que Valparaíso merece continuar con una gestión municipal anclada en esos principios y objetivos.

Por último, ¿cómo ve el escenario eleccionario en Viña del Mar, donde Andrea Molina aparece como la gran carta de Chile Vamos, pero por otro lado se perfila de buena manera Macarena Ripamonti, del Frente Amplio?

- Mi candidata, claramente, es Macarena Ripamonti, a pesar de que conozco a Andrea y tengo una opinión personal positiva de ella, pero mi candidata es Macarena y trabajaremos para que sea la próxima alcaldesa de Viña del Mar. Será una competencia estrecha y reñida, lo que habla muy bien del despliegue y trabajo de Macarena y su equipo, y de los candidatos a concejales que la acompañan. Creo que Viña del Mar está en proceso de conciencia plena de que la gestión municipal no ha sido buena, hace días se conoció un informe de Contraloría que solicité, donde da cuenta del deficiente manejo de las cámaras de televigilancia, en una comuna que tiene problemas crecientes de seguridad ciudadana, y estas cámaras no estaban operativas o estaban funcionando de manera irrregular. Creo que hay conciencia que Viña del Mar tiene tremendos desafíos y que la Viña que conocemos se ha transformado en dos: la Viña de los cerros y la Viña "ciudad bella" que sólo es una parte de la comuna. El cuento de Macarena es integrar Viña del Mar, junto a sus ciudadanos, no en una franja del borde costero, sino que con el conjunto de los viñamarinos y viñamarinas. Eso se está haciendo desde el trabajo con los territorios y ciudadanos, y eso fortalece la candidatura de Macarena Ripamonti y tengo mucha confianza en que ella va a ser la próxima Alcaldesa de Viña del Mar.

PURANOTICIA

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