Las dramáticas proyecciones del comercio y el turismo de Valparaíso y Viña del Mar de cara a fin de año y la temporada estival

Desilusión, incertidumbre y pesimismo. Estos tres podrían ser perfectamente los términos que mejor describan el sentir del mundo comercial, turístico y hotelero de Valparaíso y Viña del Mar, en el marco de la temporada estival que se avecina, y que llega con un antecedente demoledor: el retroceso a Fase 2 de «Transición» en la región Metropolitana, que incluye cuarentena de fin de semana y, por consiguiente, la restricción de movilidad hacia esta zona.

Y es que apenas la subsecretaria del Interior, Katherine Martorell, anunció que la totalidad de la región Metropolitana retrocedía en el plan «Paso a paso», los teléfonos de los hoteles, hostales y centros de alojamiento de las dos ciudades más habitadas de la región de Valparaíso comenzaron a sonar con un denominador común: cancelar las reservas realizadas para las fiestas de fin año y comienzo de la temporada alta.

Este verdadero golpe en el mentón para la actividad comercial se sintió con fuerza, pues los pagos anticipados para reservar debieron ser devueltos, lo que se suma a la incertidumbre propia de la región de Valparaíso, que también ha aumentado su positividad durante las últimas semanas, lo que perfectamente podría venir de la mano con un retroceso a Fase 2. En caso de ocurrir esto -indican los dirigentes del rubro comercio y turismo- sería la lápida para la temporada veraniega.

ESCENARIO COMPLEJO

Marco Brauchy, presidente de la Cámara de Comercio y Turismo de Valparaíso, explicó a Puranoticia.cl que "como comuna somos absolutamente vulnerables en términos de la relación que tenemos con la región Metropolitana, hoy en día nuestro único mercado de corto aliento en el mercado nacional, y el que tenemos que explotar y recuperar. Pero por las restricciones de la movilidad intrarregional, es imposible".

Tomando en consideración que, actualmente, la única posibilidad que tienen de trasladarse desde la capital a Valparaíso es por permisos: de salud, por un funeral o por un permiso laboral colectivo, hace prever que la restricción es absoluta.

"Eso es un golpe durísimo, pues todas las reservas en la ciudad y en todo el borde costero, incluido Viña del Mar y Concón, donde se celebra el cierre de año, que se había confirmado que se realizaban los fuegos artificiales, en la bajada de Fase 4 a 3 y de 3 a 2 en la Metropolitana, significó que el mismo día comenzaran a cancelarse las reservas. Eso es durísimo y pone en riesgo una temporada alta más, que tiene doble significado, porque está en riesgo la celebración de fin de año y el mercado de la región Metropolitana para toda la temporada alta", lamentó el dirigente gremial.

Por su parte, Rodrigo Rozas, presidente de la Cámara de Comercio y Turismo de Viña del Mar, comentó a Puranoticia.cl que "teníamos en su momento bastantes expectativas positivas, pero cuando retroceden a Fase 2, con eso claramente las esperanzas, expectativas y proyecciones comienzan a cambiar y comienza la incertidumbre del verano y de la temporada que ya no tiene su valor agregado y sus actividades, como el Festival de Viña, la incertidumbre de qué pasará con los fuegos artificiales, entonces eso le hace mal a la actividad comercial y económica".

Rozas también indicó que "Viña del Mar es una ciudad que su naturaleza se desarrolla hace bastantes años en la hotelería, la cafetería, en el área turística y de comercio, y hoy estamos en una situación bastante compleja, con un pánico empresarial no menor, porque lo que pensábamos de tener una temporada con turismo interno importante, la pandemia nos ha enseñado que proyectarse al futuro es bastante complejo".

Y PODRÍA SER PEOR

Si bien, el retroceso de fase en la región Metropolitana fue recibido como un golpe al mentón en el rubro turístico de la región de Valparaíso,  lo cierto es que la situación podría ser incluso peor, pues tomando en cuenta el aumento de casos activos y la positividad de nuevos contagios, la autoridad sanitaria, al menos, podría llegar a considerar algunos cambios en el plan «Paso a paso» de Valparaíso y/o Viña del Mar, pero también en toda la zona, tal como ocurrió en Santiago.

Ante esta eventualidad, el titular de la Cámara de Comercio y Turismo de Viña del Mar dijo que "más que un golpe, esto significaría un cierre importante del sector gastronómico-cafetero y parte del comercio, porque pasando a Fase 2 no podrían funcionar algunos restaurantes, sólo con terrazas, pero la realidad de toda la actividad comercial-turística, es que no todos los negocios cumplen con las condiciones para tener terraza".

Rodrigo Rozas inisistió en la idea de que "el paso a Fase 2 en Viña del Mar podría ser consecuencia de cierres de muchos locales, pensando que estuvimos siete meses sin funcionamiento, prácticamente un año con atención al público anormal, contando el estallido social. Estamos inmersos en una situación difícil y en un escenario complejo de proyectar. Turísticamente sólo nos queda esperar un poco para ver qué podemos hacer, porque si la región retrocediera sería lamentable, porque nos costó mucho".

En tanto, el líder del Comercio y el Turismo de la Ciudad Puerto manifestó que "a propósito de la crisis sanitaria y de la nula política pública respecto a cómo enfrentar el fomento y la sobrevivencia de las pymes del ecosistema turístico... claro, todavía puede ser peor, evidentemente. Somos dueños de establecimiento y no nos ponemos nunca en los peores escenarios, pero bajar de fase en Valparaíso, o en la región, como se está haciendo ahora en bloque, es peor".

Consultado acerca de si un eventual retroceso a «Transición» podría ser la lápida para muchos locales, Brauchy recordó que el llamado a reapertura vino aparejado de un gran sacrificio económico de dueños de locales, lo que se suma a que muchos trabajadores acogidos al seguro de cesantía hoy ya no cuentan con esos fondos, y que se avecina el plazo pagar créditos, ya sea comerciales o del Fogape, entonces efectivamente podría ser durísimo para el rubro.

Bajo ese escenario, cerró diciendo que "hoy día, cerrados nuevamente, no hay ninguna posibilidad, bajo estas condiciones, de pagar los créditos contratados, de cumplir los compromisos adquiridos. Si no hay ingreso, no hay capacidad de pago, el que sólo se genera teniendo actividad. Hoy eso no está y no hay ninguna posibilidad bajo estas condiciones".

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