¿Es tiempo de retomar el proyecto de tren rápido entre Valparaíso y Santiago? Consenso es transversal en Diputados de la V Región

Si bien, desde los primeros años del regreso a la democracia que se viene hablando de la construcción de un tren que permita conectar las regiones de Valparaíso con la Metropolitana, no fue hasta el 1 de junio de 2019, mediante la Cuenta Pública a la Nación del presidente Sebastián Piñera, que la iniciativa dio un paso concreto al ser declarado "de interés público" el proyecto de tren de pasajeros y carga que comunique Santiago con Valparaíso, además de la ciudad de San Antonio.

"El Ministerio de Obras Publicas ha declarado de interés público los proyectos para construir los tan anhelados trenes de pasajeros y carga, que conectarán la ciudad de Santiago con los puertos de Valparaíso y San Antonio, y preparándonos para llamar a una licitación internacional". Con estas palabras, el jefe de Estado se ganaba la gran ovación de aquella noche de sábado en el salón de honor del Congreso Nacional.

Y es que este anuncio fue celebrado de manera transversal por todas las bancadas políticas pues, como ya se dijo, se trata de un viejo anhelo de los ciudadanos de la región de Valparaíso, pero también de los de la Metropolitana, que tendrían "más cerca" la posibilidad de respirar aires más limpios y de apreciar el mar, algo muy valorado en la capital.

EL PROYECTO DE TVS

Días después del anuncio del presidente Piñera, se conoció que en realidad habían dos proyectos que fueron presentados ante el Consejo de Concesiones del Ministerio de Obras Públicas (MOP), y que ambos fueron declarados "de interés público" por parte del Gobierno, considerando que los dos presentaban claras diferencias, todas muy estudiables.

El primero de ellos pertenece al consorcio TVS, compuesto por el grupo chileno Sigdo Koppers, Acciona y Lationamérica Infraestructura, cuyo costo es de US$ 2.635 millones, y propone una concesión a 50 años, con trenes que podrán transportar a 890 personas y con una velocidad que alcanzarían los 200 km/h para un viaje de 45 minutos entre Santiago y Valparaíso. 

El precio del pasaje de este tren rápido comenzaría en los $5.000 (según asiento y horario).

En cuanto al trazado a construir, sería una faja de 132,3 kilómetros, con estaciones en las ciudades de Valparaíso, Viña del Mar, Casablanca y Santiago. Justamente en la región Metropolitana habrá puntos de transferencia de carga y descarga, además de terminales de ordenamiento ferroviario.

Según TVS, el tren Valparaíso-Santiago es un proyecto que "busca mejorar la conectividad de las regiones V y Metropolitana, reduciendo significativamente los tiempos de viaje y mejorando la calidad de vida de las personas".

Y agregan que se trata de una iniciativa pionera, ya que será el primer tren de alta velocidad de Sudamérica, desarrollado en su totalidad por privados, sin subsidios del Estado. Junto a ello, indicaron que además de ofrecer "un traslado rápido y seguro a más de 7 millones de habitantes, esta iniciativa apunta a resolver las necesidades vinculadas al incremento de carga de los dos principales puertos del país: Valparaíso y San Antonio".

LA INICIATIVA DE AGUNSA

En la vereda del frente está el consorcio formado por las empresas Agunsa, FCC y Talgo, el cual planteó al MOP una concesión por 40 años, con una inversión de US$ 2.151 millones y un trazado que comienza en la Estación Mapocho y que contempla una estación en el límite oriente del aeropuerto Arturo Merino Benítez, a lo largo de 14 kilómetros.

El trayecto continúa por la ciudad Tiltil y emprende rumbo al norte donde, a lo largo de 37,2 kilómetros atraviesa la cuesta La Dormida (se requeriría de la construcción de un túnel) para finalmente llegar a la provincia de Marga Marga, donde se conectaría con la línea existente del metro que pasa por Viña del Mar y llega a Valparaíso, completando otros 60,4 kilómetros.

La iniciativa del consorcio también propone la construcción de un ramal hacia el puerto de Ventanas, en la comuna de Puchuncaví, dedicada exclusivamente al transporte de carga, en un tramo de 39,5 kilómetros.

En cuanto a la demanda de pasajeros, estimaron que unas 13 millones de personas lo usaría al año 2026.

Acerca del valor del pasaje, el proyecto de Agunsa, FCC y Talgo indica que éste bordearía los $ 5.500 entre Santiago y Valparaíso-Viña del Mar, con una capacidad para transportar a 600 pasajeros en convoyes que podrían alcanzar los 250 km/h. Este es el gran aliciente de esta iniciativa, pues el viaje entre ambas regiones sería en tan sólo 32 minutos.

ESTALLIDO SOCIAL, PANDEMIA Y CONGELAMIENTO

Las buenas noticias en torno a la materialización de este ansiado proyecto se mantenían frecuentemente en la agenda noticiosa nacional, incluso con el entonces ministro de Obras Públicas, Lucas Palacios, señalando que "ambos proyectos son interesantes y están en la línea de modernizar y hacer menos contaminante nuestro transporte".

Pero con el paso de los meses, y la masiva salida de los chilenos a las calles exigiendo el cumplimiento de demandas históricas desde el 18 de octubre de 2019, lo que vino aparejado de innumerables hechos de violencia en todo el país, hizo que el proyecto comenzara lentamente a postergarse, desapareciendo el tema de la cobertura de los medios de comunicación.

Y por si esto no fuera suficiente, en marzo del 2020 se confirmaba en Chile la llegada del entonces misterioso virus SARS-CoV-2, un nuevo tipo de coronavirus que afecta a las personas y cuya enfermedad se denomina Covid-19, causando gravísimos estragos en la población mundial y nacional. Hasta el cierre de esta nota, el país reportaba 1.639.123 casos de Covid-19 y 36.945 decesos por causas asociadas a este coronavirus.

Todo esto originó que el pasado 15 de febrero de 2021, el Ministerio de Obras Públicas (MOP) confirmara que debido a la pandemia del Covid-19, y la consiguiente crisis económica, el proyecto de tren rápido Santiago - Valparaíso debió ser congelado: "Debido a la pandemia que afecta a nuestro país y al mundo, en este momento los estudios de ambas propuestas se encuentran suspendidas", señalaron desde la Dirección de Concesiones del MOP.

Por su parte, la gerenta del consorcio TVS, Marisa Kausel, explicó que "producto de la pandemia, el MOP mantiene suspendidos los estudios de la iniciativa privada, debido a la permanente variabilidad a la que están sujetas las diferentes comunas que entran y salen de cuarentena, y a los problemas que se han presentado en la movilidad en el país".

PERO DESPUÉS DE LA TORMENTA...

Durante el mes de febrero, fecha en que se confirmó el congelamiento de ambos proyectos por parte del MOP, el país enfrentaba el inicio de la denominada "segunda ola" de contagios, lo que terminó con durísimos meses venideros, reportándose incluso el 9 de abril un total de 9.171 casos nuevos de este virus, la cifra más alta desde que comenzó la emergencia sanitaria en el país.

Pero hoy, comenzando el mes de septiembre, la realidad es diametralmente opuesta: 375 nuevos contagios el último día, otras ocho personas fallecidas por causas asociadas al Covid-19 y un total de 3.568 casos activos, vale decir personas que actualmente tienen la capacidad de contagiar la enfermedad a otras (etapa activa del coronavirus).

Bajo este contexto, y aprovechando el inicio de obras de construcción del tren que unirá Santiago con Melipilla, el diputado por la región de Valparaíso, Andrés Celis Montt, instó al presidente Piñera a retomar este viejo anhelo de los vecinos de estas dos regiones más pobladas del país: el tren rápido que unirá Valparaíso con Santiago.

"Estimo positivo el inicio de obras del tren Santiago - Melipilla anunciado por el presidente Sebastián Piñera, pero como la región Metropolitana no es Chile, sería bueno que también se retome el proyecto de tren rápido Santiago - Valparaíso, congelado producto de la pandemia", indicó el parlamentario de Chile Podemos Más, adjuntando en el mensaje al Ministerio de Obras Públicas y a su titular, Alfredo Moreno.

... ¿SALE EL SOL? 

Buscando ahondar más en estos dichos, Puranoticia.cl tomó contacto con el diputado Celis (RN), quien pese a estar con licencia, indicó que "es positivo y muy importante el anuncio del proyecto Tren Santiago-Melipilla. Acciones de esta naturaleza también deberían replicarse en otras regiones, en especial en la región de Valparaíso. Es urgente potenciar el transporte ferroviario. La inversión en este rubro se justifica dado el aumento del parque automotriz y el movimiento turístico nacional e internacional que se produce durante todo el año en esta zona. Cuando termine la pandemia vamos a necesitar reactivar la economía y el trabajo. En ese momento, es vital que el proyecto Tren Valparaíso-Santiago ya esté en curso, brindando puestos de trabajo en su construcción y, posteriormente, transportando a más de 890 pasajeros sentados a una velocidad de 200Km/h".

Por su parte, el diputado Rodrigo González (PPD) sostuvo que "evidentemente se debe retomar. Está atrasado, debió haber avanzado más rápidamente de acuerdo a las promesas presidenciales y a todo lo que la comunidad regional está esperando. Esta es una esperanza frustrada de muchas décadas, entonces creo que hay un consenso transversal, unánime, que es un elemento fundamental para el desarrollo de esta región y su estrategia de desarrollo. Por eso, si hubiese una acelaración en esto, se le agradecería mucho al Gobierno. ECON: Creo que siempre están dadas las condiciones económicas, aunque siempre se diga que para las grandes inversiones no lo están, pero estos son proyectos estratégicos, fundamentales, cruciales, son como la vena cava del sistema, entonces no se puede dejar de hacer".

El diputado Marcelo Schilling (PS) comentó al respecto que "llevamos como tres décadas hablando del proyecto. Yo creo que como parte de las medidas de reactivación económica, con componente verde, porque un sistema de transporte seguro y expedito entre la región Metropolitana y Valparaíso, pasando por San Antonio, disminuiría el impacto de los combustibles en el medio ambiente y calientamiento global, además que le daría un impulso fuerte a la economía a la zona y el país, así que sería muy bueno. Que yo sepa, no ha habido una caída terrible en el comercio exterior ni en las importaciones, así que como el financiamiento es el transporte de carga, que va a seguir creciendo, no habría razones para que piensen que será una inversión desfinanciada".

La transversalidad se mantuvo con el diputado Andrés Longton (RN), quien expuso que "nunca hay que dejarlo, siempre debe ser una prioridad, pero lamentablemente las burocracias e indefiniciones de parte del aparato público hacen imposible que esto sea continuado en el tiempo. Creemos que debe haber una verdadera voluntad en ese sentido, y así como se terminó el tren Melipilla - Santiago, creemos que con la misma fuerza con la cual comenzó a ejecutarse este plan el 2019 debiera impulsarse el tren Santiago - Valparaíso. Entonces me parece que es momento de avanzar en aquello, considerando también las altas congestiones vehiculares y el crecimiento de las ciudades. Me parece que mientras más dilatemos esto, más va a ir en perjuicio de este crecimiento demográfico que no tiene vuelta atrás".

Finalmente, la diputada Camila Rojas (Comunes) explicó que "el proyecto de tren entre Valparaíso y Santiago, es una idea que se viene conversando hace mucho tiempo, desde el principio del siglo pasado. Es necesario ver formas de conexión que puedan ayudar a descongestionar y también a modificar la matriz energética de nuestro transporte. Los trenes siempre son una alternativa para el transporte público, ayudando a descentralizar y acercando a las personas entre ciudades. Importante destacar que la factibilidad de este tipo de proyecto no vaya en desmedro del medio ambiente y las comunidades locales, porque no podemos permitir que en nombre del progreso se sigan desplazando comunidades y atentando contra la naturaleza. Hay que discutir la viabilidad del proyecto, buscar mejores opciones para conservar el medio ambiente y trabajando con las comunidades organizadas de los diversos territorios".

(Imagen principal: referencia)

PURANOTICIA