Sábado 15 de agosto de 2020 13:32
El estremecedor relato de la hija del presunto asesino de Ámbar y su teoría del caso: “Esto lo planificaron los dos”
La hija del presunto asesino relató cómo fue su vida con Hugo Bustamante y se refirió a sus sospechas sobre la participación de la madre de Ámbar en el caso.
Una silenciosa testigo que en primera fila pudo compartir quizás los últimas días en libertad que tendrá en su vida Hugo Bustamante, presunto asesino de Ámbar, fue su hija, una mujer de unos 30 años quien entregó un estremecedor relato a la Revista Sábado contando detalles desconocidos hasta ahora y entregando su teoría del caso por la presunta participación que podría haber tenido la madre de la pequeña asesinada y descuartizada.
Esta mujer de 30 años la cuál para proteger su identidad la Revista Sábado llamó Marcela nació en 1990, mientras Hugo Bustamante cumplía pocos meses de su primera condena de diez años por cometer nueve robos en lugar habitado, cuatro hurtos y cinco robos con fuerza.
"Yo crecí siempre sabiendo quién era mi padre", parte su relato. "Mi madre jamás me lo ocultó. De siempre supe que él estaba preso. Él ha pasado casi toda su vida en la cárcel", dice.
Su figura paterna, explica, fue su abuelo materno. Creció bajo su cuidado y el de su abuela materna en una casa de Villa Alemana. Cuando tenía cinco años, Hugo Bustamante pidió conocerla, a través de su madre, quien por entonces trabajaba como empleada doméstica.
Fue entonces que esta pequeña comenzó a visitarlo en la cárcel, era "muy cariñoso, atento y siempre preocupado de tenerme un presente o dinero. Quizás no era mucho, pero era lo que él podía en ese entonces. Pero nunca fue de mi agrado visitar ese lugar. Tengo recuerdos tristes de esas visitas. Varias veces llegué llorando a mi casa, porque tu comprenderás que ese no es un lugar para un niño. Veía muchos hombres, no de muy buen aspecto, y muchas cosas no las comprendía".
La hija de Bustamante cuenta además que tras varias visitas le suplicó a su madre que no la llevará más a la cárcel a verlo y dejo de ir, todo esto hasta más menos el año 2004, cuando esta pequeña ya cumplió 14 años y el ya había salido de prisión.
Marcela cuenta que se animó a ir a verlo, ahora vivía junto a la parvularía Verónica Vásquez y su hijo.
"En ese momento tenía una buena situación económica. Recuerdo haber salido con él en ocasiones a comprarme ropa, pero era Verónica la que lo incitaba a eso. Ella era una mujer muy tierna, muy cariñosa. Siempre lo incentivó a recuperarme como hija".
"Mi padre nunca ha sido mucho de demostrar afecto por las personas. Siempre ha sido un hombre muy duro. Pero de alguna manera yo, como hija, lograba llegar a su corazón. Era cariñoso. A veces lloraba y me pedía disculpas por no ser un papá presente como yo merecía. Le venía esa culpa y en ese momento era importante para mí escuchar eso. Yo lo veía arrepentido. Le veía caer lágrimas. Ahora, con lo que ha pasado, lo pongo en duda", sostiene.
EL ASESINATO DE VERONICA Y SU HIJO
La hija de Bustamante relata que la vida de su padre con Veronica y su hija era normal, ella relata que "nunca vi peleas" y que "Verónica era muy accesible a todo lo que él decía. Nunca vi una discusión de por medio. Verónica siempre respondía con un "si" o un "bueno, amor".
Luego de aquella vez en enero del año 2005 salió a la luz que Hugo Bustamante había asesinado brutalmente a Verónica Vásquez y a su hijo a quienes estranguló, descuartizó e introdujo a ambos en un tambor que enterró en el patio de una casa que arrendó con ese objetivo.
Fue la propia Policía de Investigaciones que tras una denuncia anónima de un vecino llega al lugar, encuentra los cuerpos e informa a la opinión pública, ante este hecho la hija de Bustamante relata que "mi papi, o sea mi tata, le estaba contando a mi madre lo que había escuchado en la radio. Yo iba bajando y lo oí de casualidad. Era muy temprano en la mañana. Apenas lo escuché, rompí en llanto. No podía creer lo que había hecho".
QUEDA EN LIBERTAD Y SE RENCUENTRA CON SU PADRE
Fue el año 2016, un poco más de 10 años después de aquel horrible crimen que la hija de Bustamante se enteraba que su padre saldría en libertad condicional junta a más de 700 reos de la Región de Valparaíso.
"En su momento pensé en buscarlo para pedirle explicaciones. Que me contara qué estaba pensando. Por qué lo hizo", relata.
Fue la abuela materna de ella quien le comentó que su padre quería verla y retomar el contacto ella, Marcela ya tenía unos 25 años, muy nerviosa cuenta accedió a verlo.
En aquel reencuentro apenas la vio, Marcela dice que su padre se puso a llorar.
"Me encontré con un hombre ya viejo, arrepentido, con lágrimas en los ojos. No podía creer que la mujer que tenía enfrente era esa niña pequeña que había dejado de ver durante tanto tiempo. Ya era abuelo de dos niños", recuerda.
"Me abrazó fuertemente. Y entre risa y llanto me decía que yo era la única mujer capaz de hacerlo llorar. Yo respondí a esas manifestaciones de cariño pero con nerviosismo. No olvidaba lo que había hecho".
La hija de Bustamante recuerda aquel encuentro en donde tomaron once junto a la hermana, la madre y los sobrinos del presunto asesino de Ámbar,
Consultada respecto de si le preguntó a su padre sobre sus crímenes, Marcela respondió "no tuve el valor para hacerlo".
Sobre su liberación, Marcela añade que "el sistema judicial falló. El tema fue que había demasiados presos y tenían que hacer cupo para los nuevos. Pero estamos hablando de una persona que cometió un doble homicidio. No estamos hablando de una persona, entre comillas, digna de andar por la calle. Mi padre no merecía estar libre. Por el bien común. Por él y por la gente que lo rodeaba".
CASO ÁMBAR
La hija de Bustamante cuenta además que su padre tenía una "facilidad de envolver a la gente. Me daba cuenta por el tema de sus parejas. Porque, claro, imagínate, ¿cómo convences a una mujer de tener una relación, una vida marital, sexual o lo que sea, siendo que saliste de la cárcel hace poco por un asesinato doble?".
Sobre la relación que su padre tenía con la madre de Ámbar dice que "con ella congeniaban bien. Andaban para todos lados juntos. Trabajaban juntos. Yo los veía bien. Haciendo una vida familiar, porque el hijo de Denisse también vivía ahí".
La hija de Bustamante acude a la casa de su padre luego que una de sus primas le alerta que el sábado 1 de agosto la Policía estaba en la casa intentando hablar con su padre, ahí Marcela relata que cuando llegó vio a su padre y a la madre de Ámbar drogados con clonazepam y ebrios, por lo que ella tuvo que explicarle a los efectivos de la PDI que no estaban en estado de dar explicaciones.
Cuenta además la hija de Bustamante que en el mismo living donde encontraron bajo tierra el cuerpo de Ámbar ella tuvo una de las últimas conversaciones con su padre.
"Se sentó en ese sillón y me miraba. Me decía que él era la peor huevá de padre que yo hubiese podido tener. Que no merecía que yo estuviera ahí, que yo siempre había sido la niña de sus ojos, que no se iba a perdonar nunca lo que me había hecho. Y balbuceaba cosas que en su momento no me hacían sentido", recuerda.
En ese contexto, "hubo algo, un momento en que él le dijo a la Denisse "vo me traicionaste". Creo que él debe haber pensado que la Denisse ya había hablado. Yo lo escuché y le dije "¿de qué traición estai hablando?". Se quedó callado, agachó la cabeza y no habló más. Dentro de mí pensé: "Estos tienen algo que ver. Estos huevones algo hicieron con esta niña".
Respecto del comportamiento de Denisse en esos días, Marcela relata que "estaba más preocupada de lo que podía pasar con Hugo, No trató de buscar a su hija o de hacer contacto con gente que la conociera. Eso era raro".
Incluso, Marcela recuerda que por esos días le dijo a su padre "Hugo, ¿tú tenías algo que ver con esto?, por favor dime la verdad, confía en mí, y si necesitas ayuda yo te la voy a dar, pero por favor confía en mí".
"Nooo", me dijo. "Imagínate, si hubiese pasado algo, tú sabís que aquí vive mi mamá, viven mis sobrinos, hubieran escuchado algo visto algo. Imagínate si me hubiese llevado un cadáver de aquí. Me hubiese visto medio mundo".
La Hija de Bustamante da su impresión respecto de posibles responsabilidades de otros miembros de la familia, en quienes puso el foco el padre de Ámbar, ella sostiene que "creo que el papá de esta niña habla desde su dolor, para buscar responsables. Mi abuela, mi tía, mis primas, no tienen nada que ver con esto. Yo igual lo entiendo. En un momento dentro de mí estuvieron las ganas de poder ayudarlo e ir con una demanda en contra de Denisse, porque de verdad a mí nadie me saca de la cabeza que esto lo planificaron los dos".
"Evidentemente él tiene un problema psicológico. Quizá tiene que ver con su ambición. Pero estamos hablando de mutilar un cuerpo. Más encima ahora, en los antecedentes aparece que violó a esta niña. Es algo que no tiene ninguna explicación ni lógica. Solamente una mente enferma es capaz de participar en algo así. Él y Denisse son un par de enfermos", finaliza.
PURANOTICIA