Fedefruta pedirá "Fogape frutícola" al triplicar pérdidas por lluvias de enero

Durante este jueves, la Fedefruta confirmó que tras la declaración de emergencia agrícola en diversos sectores de la zona centro-sur del país, producto del reciente sistema frontal que afectó con precipitaciones a varios productores, pedirán la posibilidad de un "rescate" para el sector a través de créditos.

El presidente de la confederación, Jorge Valenzuela, manifestó que tras las lluvias "hay zonas en que la fruticultura está parada, no hay cosechas ni embalaje de fruta, siendo que estamos en plena temporada".

A dos semanas de la Catástrofe Agrícola, los productores frutícolas documentaron los daños de las lluvias como un fenómeno exacerbado por un "avance agresivo" de la pudrición y enfermedades fungosas en la fruta, a causa de bajas temperaturas en febrero y la alta humedad en los campos. Esto, al día de hoy, ha llevado a por lo menos triplicar las pérdidas de los productores, según el gremio.

"Las lluvias, en una primera etapa, provocaron daños de partidura, caída de fruta, de árboles y parrones, y eso se cuantificó en 150 millones de dólares. Pero conforme han pasado las semanas el daño en la fruta ha aumentado muchísimo", comentó Valenzuela, quien agregó "la pudrición y los hongos han avanzado de una manera tal, por la humedad alta y las temperaturas de los días posteriores, que en este minuto la uva de mesa no se está cosechando en la zona central, ni siquiera se está embalando".

Con la información que Fedefruta ha recogido de reuniones con consejeros y productores, se proyecta que la pérdida en uvas de mesa blancas sea entre un 70% y 80% de la producción, desde la zona centro hacia el sur, y en uva roja, cerca de un 30% de las cosechas, "aunque aquella estimación está en veremos, dependiendo de cómo se siga comportando el clima", afirma el presidente del gremio. Sin embargo, "todas las variedades están dañadas, incluso algunas más tardías como Red Globe, Crimson y Autumn Royal".

En zonas como el Valle del Aconcagua, en la Región de Valparaíso, se reportó un 42% menos de producción a causa de esta catástrofe agrícola, en comparación al mismo período de 2020. En tanto, en la Región de O'Higgins, no hay certeza sobre cómo se van a cosechar variedades como Scarlotta, Crimson y Red Globe.

"El rubro se quedó sin capital de trabajo, no hay cómo cumplir con los compromisos de esta temporada, ni cómo iniciar la próxima, mientras no haya un paquete financiero de ayuda específica para los productores, por lo que necesitamos un rescate del sector frutícola", concluyó Valenzuela, que mencionó que lo hecho por Minagri se encuentra enfocado en productores muy pequeños.

"Hay muchísimos afectados que quedan al margen de alguna ayuda. Por eso estamos trabajando para proponer un Fogape Frutícola, con una flexibilización de los requisitos para optar al instrumento, mayores garantías del estado como aval, años de gracia, etc.", manifestó el líder gremial.

PURANOTICIA