Lorena Donaire: La activista medioambiental de Modatima que busca ser diputada por el distrito 6

La activista, profesora, fundadora y vocera de Mujeres Modatima (Movimiento de Defensa por el acceso al Agua, la Tierra y la protección del Medioambiente) Lorena Donaire busca conseguir un escaño en el distrito 6 con Revolución Democrática, para representar a las comunas de Cabildo, Calle Larga, Catemu, Hijuelas, La Calera, La Cruz, La Ligua, Limache, Llay Llay, Los Andes, Nogales, Olmué, Panquehue, Papudo, Petorca, Puchuncaví, Putaendo, Quillota, Quilpué, Quintero, Rinconada, San Esteban, San Felipe, Santa María, Villa Alemana y Zapallar.

Donaire deberá enfrentarse a los otros 68 candidatos que pretenden lo mismo en la circunscripción, entre ellos, caras conocidas que buscan la reelección como Carolina Marzán, Camila Flores y Andrés Longton.

Donaire es la única dirigenta social que va por el distrito, pero no se intimida por su competencia. "Aún cuando me enfrento contra aquellos partidos que están robando el agua en mi territorio", según contó en entrevista con Puranoticia.cl

Además, cuenta con el respaldo de Modatima, a quienes considera su familia, y desde donde impulsaron proyectos para llegar a la gobernación regional de Valparaíso y a la Convención Constitucional. Ambos objetivos los lograron, con la elección de Rodrigo Mundaca como gobernador, y de las constiuyentes Carolina Vilches, Ivanna Olivares, Manuela Royo y Yarela Gómez. Junto a ellas, también alcanzaron concejalías femeninas en cuatro comunas del país. Ahora, el desafío es llegar al Congreso con Donaire.

Durante sus años como activista y junto a sus compañeras, han vivido un camino complejo "con amenazas de muerte, con persecución política muy fuerte, con nuestros teléfonos pinchados y un sinfín de situaciones que a veces es muy difícil (...) te provoca miedo, pero no provoca que seamos héroes o heroínas, entendemos que no podemos soltar lo que hacemos porque vemos cómo está la gente en nuestro territorio. Hay desilusión, hay desesperanza y eso nos moviliza y nos hace permanecer en la lucha todos los días”, relató Donaire.

La profesora viene de una familia de dirigentes sociales y desde adolescente comenzó a ser activa en su comunidad. "Llevo varios años en la lucha por la recuperación del agua, pero también como dirigenta social activa de las comunidades rurales antes de Modatima, movimiento al cual ingresé en 2013”.

Posterior a ello, la docente creyó necesario ponerle a la lucha perspectiva de género y así fundó Mujeres Modatima junto a Verónica y Carolina Vilches.

“Era muy necesario porque somos omitidas en el Código de Aguas, porque somos omitidas en las gestiones del agua y en las discusiones y sin embargo somos quienes estamos en forma permanente los territorios, no tan solo dando el agua a nuestras familias sino que también a nuestras comunidades”, explica.

El camino por la defensa de los derechos de la tierra y el agua no ha sido fácil, no solo en el ámbito de su integridad física, sino que en el personal y familiar.

"Yo de profesión soy profesora y apenas empezamos la lucha por la recuperación del agua quedamos sin trabajo. Ha sido difícil también el tema de los colegios para mis hijos porque también se les han negado matrículas, entonces los tengo en tres colegios distintos. De hecho a mi hija mayor que hoy día tiene 16 años y que también es parte del movimiento, ella quedó sin colegio literal y mucho antes de la pandemia ella ya hacía escuelas online porque no había otra alternativa”, revela Donaire.

¿Eso sucedió a consecuencia directa de su activismo? 

- Sí, de nuestra lucha y de nuestro activismo. También hemos tenido las amenazas típicas de los alcaldes. Como yo llevaba a mis hijos a las manifestaciones, yo soy madre soltera entonces tengo que andar cargando con ellos para todas partes, y obviamente los llevaba a las manifestaciones siempre con los cuidados que se requieren (...) Entonces claramente era complejo cuando te amenazaban que te iban a quitar a tus hijos, que te iban a denunciar por “adoctrinarlos” cuando en definitiva tú luchas por la recuperación de la vida digna para tus niños porque el agua es vida. Nosotros no somos ecoterroristas como nos llamaban en algún minuto. Los ecoterroristas son otros, son aquellos que destruyen la naturaleza, que han llegado a asentarse a nuestros territorios y nos han dejado sin lo principal que es el agua, sin nuestros bosques esclerófilos, sin aquellos paisajes que ya no tenemos y nuestros hijos ya no los conocen. Por ejemplo, mi hija mayor vino a conocer recién el 2019 el Río Maipo y fue impresionante darme cuenta de que yo luchaba por el agua y mis hijos no conocían ni los ríos, no me había planteado eso, entonces todo el sentido de esta lucha es hacia allá, para recuperar el agua para nuestros territorios. Pero principalmente para las nuevas generaciones que tienen todo el derecho a tener una vida como la hicimos nosotros en torno al río y que nos tocó en primera persona perderlo todo por el despojo del agua.

¿Cómo se gestó su candidatura al Parlamento?

- En lo político, esta es primera vez que tomo un desafío como éste y es un desafío que se toma desde Modatima. Igual que como nuestro compañero, el gobernador Rodrigo Mundaca que perdió la interna porque él quería ser constituyente, pero lo elegimos como nuestro gobernador. Entonces este es un desafío que nos planteamos como movimiento, de estar en la institucionalidad, de nuestras compañeras que están en la Convención en el orden de las cosas porque ya no podíamos seguir luchando de la forma en que lo estábamos haciendo, que si bien teníamos todas las buenas intenciones, nada ha cambiado. Hay un compañero que dijo ‘ya basta de gritar desde las graderías, entremos a jugar el partido a la cancha’. Y así ha sido y ahora me tocó a mí y es un gran desafío.

¿Cómo se da el inicio de su carrera política? 

- Desde el 2018 comenzamos a recorrer Valparaíso con una mesa regional de agua junto al senador Juan Ignacio Latorre para hacer una ley del agua como un derecho humano. Desde ahí se sacó mucho material para trabajar en esta ley, pero obviamente que nunca nadie lo tomó en cuenta. En ese tiempo yo estaba sin trabajo y ahí se valoró todo lo que hice dentro de la mesa y Juan Ignacio me invitó a trabajar en su equipo como coordinadora territorial de la provincia de Petorca y de la provincia de Aconcagua enfocada principalmente en temas de agua. Esa fue la primera cercanía que tuve al mundo más político, pero yo seguí haciendo lo mismo que hacía antes, que es trabajar en las comunidades.

Por otro lado, ¿Cómo y cuándo inicia su proceso de lucha social? 

- El 2013 empecé en el agua, pero desde los 14 años soy dirigenta social porque pertenezco a una familia de dirigentes sociales. Mi abuelo fue dirigente de los campesinos en pleno periodo de dictadura, también mis tíos, mi madre y mi papá, así que soy de familia de dirigentes sociales. Una en realidad siempre hace política desde las dirigencias, pero desde el ámbito político partidista mi primera cercanía fue con Juan Ignacio y de ahí en adelante comienzo a trabajar con él, pero también muy supeditada a lo que era la causa del agua. Cuando ya se dispuso que desde Modatima disputaramos esta candidatura fue porque entendíamos que había que redactar la nueva Constitución y que había que acompañarla también en este proceso y que necesitamos nuevas leyes como derogar el Código de Aguas principalmente que es nuestro desafío y entendemos que es una postura es muy difícil en el contexto político porque para nosotros es una nueva forma de lucha... 

¿El estar dentro de la institucionalidad? 

- Claro... Es una nueva resistencia, una nueva forma y también porque hay mucha violencia política sobre todo hacia las mujeres. Nosotras veníamos arrastrando esta persecución, justamente desde todo el mundo político institucional, por la lucha y por la protección del agua. Por eso Amnistía Internacional inició una campaña en nuestra defensa, por las amenazas de muerte y por todo aquello que caía sobre nosotras como movimientos y justamente de quienes hoy están disputando el poder junto a mí. Entonces es bien difícil enfrentarse a aquello.

Claro, compartir espacio con ellos y ellas... ¿Cómo se toma ese desafío o más bien dicho choque de principios?

- Es un choque de principios sobre todo cuando nosotros estuvimos intentando hacer una campaña lo más austera que se pueda porque tampoco contamos con tantos recursos y porque además queremos que sea una campaña lo más próxima a ser ecológica. Hoy el desafío es cruzar el cerco nomás, llegar y posicionarnos. No queremos que esta sea una candidatura testimonial, queremos que vaya más allá porque soy la única dirigenta social, la única dirigenta de Modatima que va por el distrito 6, entonces es un tremendo desafío. Y con toda esta maquinaria política en que además estoy compitiendo con aquellos partidos que están robando el agua en tu territorio, estoy compartiendo con aquellos partidos que les financian las campañas a Agropetorca que son los grandes ladrones de nuestro territorio, entonces claro, eso te da más fuerza para seguir, te provoca ese efecto de rabia y resistencia. 

Las dirigentas y activistas medioambientales son un blanco constante de persecución y atentados, usted comentaba que incluso intentaron secuestrarla ¿Ha temido por su vida?

- Han entrado siete veces a mi casa. No roban nada, dan vuelta toda la casa conmigo y mis hijos dentro y eso claro, te provoca miedo, pero no te provoca que seamos héroes o heroínas, pero entendemos que no podemos soltar lo que hacemos porque vemos cómo está la gente en nuestro territorio. Hay desilusión, hay desesperanza y eso nos moviliza y nos hace permanecer en la lucha todos los días. La lucha para nosotros es 24/7 y nunca ha sido distinto. Es la entrega en forma permanente, el movimiento autogestionado, que todo sale dentro de nuestros bolsillos. Eso tú también lo vas atesorando entonces dices ‘esto no me lo pueden robar’. Esto es parte de mi vida, es parte de lo que yo he entregado. A veces con mis compañeras nos hemos planteado esto. O corre sangre o corre el río, pero algo tiene que correr. Cuando comenzó esta campaña de Amnistía Internacional, levantamos una mesa de trabajo con defensores a nivel nacional y nos llamó mucho la atención la cantidad de ellos y ellas que han sido amenazados de muerte y de forma brutal. Por eso estamos trabajando en una ley para poder llevarla al Congreso y poder proteger a nuestros defensores ambientales como parte importante de la sociedad, como entes activos de las comunidades.

¿Cuál va a ser su aporte en la Cámara Baja si sale electa? 

- Principalmente la derogación del Código de Aguas porque necesitamos urgente que las mujeres entren a las discusiones de agua y terminar con este proceso tan antidemocrático y esta ley de agua que es el soporte técnico de la privatización y la mercantilización del agua. Hablar de descentralización es muy importante para nosotros, pero también hablar de descentralización hídrica es muy importante. También, que las leyes ambientales no pueden ser una falta administrativa, tiene que haber un delito de por medio. Hace mucho tiempo estoy trabajando con Baltasar Garzón, desde el 2019 él está con 12 juristas más tratando de que se tipifique el ecocidio como un crimen de lesa humanidad. En ese sentido, desde el Parlamento podríamos hacerlo en Chile y tipificarlo como un crimen de lesa humanidad y que así ya no se nos persiga a nosotros y que sean otros los perseguidos. Tenemos que terminar con las zonas de sacrificio, terminar con los territorios de despojo como lo es la provincia de Petorca o la de Aconcagua. Y principalmente trabajar por una ley de sitios prioritarios para la conservación del ecosistema que es algo también de Modatima.

¿Cuál será su sello?

- Por supuesto que nada de esto será a espaldas ni a puertas cerradas de las comunidades sino que con ellas, como lo hemos hecho hasta ahora como Modatima en el proceso constituyente y también en el gobierno regional. Nuestro sello es trabajar con las comunidades, escucharlas, trabajar con ellas y principalmente en aquellas demandas que nacen desde los territorios y que no emergen de los consensos elitarios. Para mí es muy importante aquello, trabajar con las comunidades y no desde el oficio porque estoy aburrida de escuchar a los diputados con que digan que todas las soluciones son los oficios, que son menos que un saludo a la bandera. 

¿Qué cree usted que le hace falta al Congreso, qué hay que cambiar? 

- Fiscalización real y cumplimiento de los acuerdos. Por ejemplo, desde el año 2011 el gobierno anterior de Sebastián Piñera firmó para hacer del agua un derecho humano y nadie nunca hizo efectivo aquello. No podemos seguir con promesas incumplidas. Las comunidades están cansadas no podemos seguir esperando que lleguen diputados a buscar el voto y que después los veamos de nuevo para buscar el voto y no lo vimos nunca más. En definitiva necesitamos un compromiso real con las comunidades y es lo que esperamos hacer desde esta diputación si salimos electas.

Su fuerte es el ámbito medioambiental ¿Qué otros temas le gustaría levantar y defender si llega al Congreso? 

- Obviamente que el tema mujer para mí es muy importante, niñez es muy importante y adultos mayores es muy importante y eso transversaliza todo: el agua, la vivienda, la salud, las pensiones. Ahí vamos a estar dando una gran lucha con varios compañeros que se han sumado a esta campaña y que pertenecen a este tipo de demandas. Tenemos que ir contra la corriente, no vamos a sentarnos a hacer acuerdos que no benefician a nuestras comunidades y nuestros territorios.

¿Por qué las personas del distrito 6 deberían votar por usted? 

- Creo que a lo mejor no debieran votar por mí como Lorena Donaire, pero sí deberían votar por el proyecto de Modatima. Somos una organización que todos los logros que ha tenido han sido a favor de las comunidades y a favor de los movimientos sociales. Hacemos el llamado a que hoy se tomen en cuenta las voces de los territorios, las voces de los movimientos sociales y nosotros representamos aquello. No soy Lorena Donaire representando a Lorena Donaire o a un partido político, soy Lorena Donaire representando a mis compañeros y compañeras de los movimientos ambientales, sociales y desde los territorios. 

(Fotografías Facebook Lorena Donaire)

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