Viernes 10 de febrero de 2023 08:02
Presidente de Nicaragua asegura que no pidieron "nada a cambio" a EE.UU. para que recibiera a los 222 opositores que expulsaron
Daniel Ortega explicó que la decisión de expulsar a los 222 opositores la tomó para enviar un mensaje de estabilidad a la nación.
El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, habló en cadena nacional para asegurar que la excarcelación y expulsión de 222 opositores que se produjo este jueves no se hizo para obtener algo a cambio por parte de Estados Unidos.
"No estamos pidiendo que se nos levanten las sanciones. No estamos pidiendo nada a cambio", dijo el mandatario.
Ortega explicó que la expulsión a Washington del grupo de los opositores se produjo luego de que su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo, conversara hace unos días por teléfono con el embajador estadounidense en Managua, Kevin Sullivan, antes de un viaje a su país, y le planteara que Washington recibiera a los prisioneros.
El mandatario reconoció que no esperaba una respuesta positiva por parte de Estados Unidos a la solitud. Sin embargo, Sullivan respondió que haría la consulta a la Casa Blanca, no sin antes preguntar cuántos presos pensaba excarcelar.
"Todos", respondió Ortega. "No queremos que quede ningún rastro de los mercenarios del imperio en nuestro país", agregó, según información de la agencia EFE.
La lista que envío Ortega a Estados Unidos incluía un total de 228 presos. Según el mandatario, Washington rechazó a cuatro personas.
Entre los vetados figura Eliseo de Jesús Castro Baltodan, quien había estado en prisión en Estados Unidos por violencia contra las mujeres y que fue deportado en febrero de 2006.
También negaron el viaje a Walter Antonio Ruiz Rivera, Jaime Enrique Navarrete Blandón y el abogado José Manuel Urbina Lara. No dieron razones al respecto, aseguró el mandatario.
Al final, la lista quedó en 224 prisioneros. Dos de ellos se negaron a dejar al país: el obispo Rolando Álvarez y Fanor Alejandro Ramos, quien está condenado por tráfico de drogas.
Según Ortega, el obispo Álvarez -quien cumplía arresto domiciliario- fue enviado a una cárcel por negarse a tomar el avión a Washington.
El líder sandinista explicó que la decisión de expulsar a los 222 opositores la tomó para enviar un mensaje de estabilidad a la nación. "Quiero que el pueblo nicaragüense esté convencido de que todo lo que hacemos es para asegurar la paz"
"Gracias a Dios se produjo el milagro. Hemos recuperado la paz de la que estamos gozando. Ahora que salieron los golpistas, los mercenarios, respiramos la paz, gracias a Dios", concluyó.
(Imagen portada: AFP)
PURANOTICIA // BBC MUNDO