Jueves 10 de septiembre de 2015 17:06
Lee esta emotiva carta de una mujer a la nueva esposa de su ex marido que se viraliza en redes sociales
Conoce el contenido de esta carta aquí y el ejemplo que nos enseña una sana relación en favor de nuestros hijos.
Aquí comienza el texto:
A la madrastra de mi hija,
Yo nunca quise que estuvieses ahí. Simplemente, no eras parte del plan. Cuando era chica y soñaba con una familia, ésta nunca te incluía. No quería que otra mujer me ayudara a criar a mis hijos. El plan era que mi familia me tuviera a mí, a un papá y a nuestros hijos, sin ti. Dudo que tú quisieras tenerme en tu vida.
Dudo que tú planearas ser la madre de una niña que no pariste. Apuesto a que tu plan de familia te incluía a ti, a un papá y a sus hijos juntos, no a mi hija y a mí.
Estoy segura de que soñabas de que el día en que te convertirías en madre sería cuando dieras a luz, no cuando te casaras con tu marido. Estoy segura de que no contabas con que yo estuviese acá.
Pero Dios tiene planes que exceden los nuestros, y cuando mi pequeña familia se disolvió para formar dos distintas, yo sabía que ibas a aparecer. En mi cabeza, tú ibas a ser una bestia terrible y mi hija no iba a quererte como madre, nunca. Esperaba que fueras poco atractiva y que mi hija no te admirara. Que su papá supiera que se estaba conformando con alguien peor que yo.
Esa maldad surgía porque no podía soportar la idea de que otra mujer fuera la madre de mi hija cuando yo no estuviese cerca. Pero después llegaste. Y debo admitir que me dio un poco de celos, porque no eras lo que pensé que serías. Se suponía que fueses una arpía, ¿te acuerdas? Pero no lo eras, eras increíblemente linda.
Aceptaste a mi hija desde el principio (de la relación) y la amas a ella y a su papá incondicionalmente, y eso es una bendición para nosotros. La incluyes en todo lo que hacen y la haces sentir aceptada y amada, y pones su relación con su papá por encima de la tuya, y sólo una mujer valiente y con coraje sabe cómo hacer eso de manera decorosa.
Estoy agradecida porque estás ahí cuando yo no estoy. Estoy agradecida porque la soportas aunque sea una adolescente. Siempre respetaste mi posición como madre y aprecio que me consultes cuando no estás segura de si estás haciendo lo correcto con ella. Eres un regalo.
Debido a tu coraje para criar a nuestra hija, ella va a crecer como una mujer fuerte, mejor. Va a crecer sabiendo que una derrota en un área puede ser una victoria en otra. Yo no te veo como mi reemplazo para cuando no estoy cerca. No te veo como un "relleno" cuando yo no estoy. Tú eres su madre cuando estás con ella y cuando está conmigo.
Sé lo que es cuando una madre no puede aceptar el hecho de que su hija tenga una madrastra y estoy agradecida porque nosotras pudimos superarlo y hacer lo correcto para nuestra hija. Gracias por ser tan madura y respetuosa para criarla junto a mí y su padre. Te prometo que siempre voy a tener en cuenta tu opinión con respecto a ella.
Te prometo que nunca minimizaré tú rol en la vida de nuestra hija, ni te haré sentir como si no fueses quien la está criando. Eres una mujer valiosa y eres una extraña y valiosa gema.
Que Dios te bendiga, te quiero.
Ashley le contestó con unas cortas pero emotivas palabras a Candice:
Candice, no sé qué decir. No soy buena con las palabras como tú lo eres y como te expresas. Todo lo que puedo decir es que estoy llorando como en el final del la película "El Diario de una Pasión"...Me haces sentir tan especial...Gracias por esta carta. Hizo mi día y siempre la mantendré cerca de mi corazón. Te quiero".
Pn/Jv
PURANOTICIA